El cuidado y uso eficiente del agua es una responsabilidad en la que todos tenemos mucho por hacer
México, D. F.— En el marco del Día Mundial del Agua, la Secretaría de Medio Ambiente lanza la campaña Cuidar el Agua es cosa de Todos, que tiene como objetivo sensibilizar a las personas de la capital sobre los hábitos de consumo y cuidado de este recurso natural.
Más de la mitad del territorio de la ciudad de México es suelo de conservación, un ecosistema fundamental en la captación e infiltración de agua. Se calcula que de las fuentes ubicadas en las zonas de suelo de conservación, se obtiene entre el 6% y 70 por ciento del agua que se consume en la capital.
Es fundamental que todas las personas que viven en la ciudad de México la consuman de una manera adecuada y responsable para garantizar el abastecimiento presente y futuro de este recurso natural no renovable.
El consumo promedio de agua en la capital es de 320 litros al día por persona, una cifra superior a la recomendada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que estipula que sea entre 50 y 100 litros diarios por persona.
De estos 320 litros que por día consume en promedio un habitante de la capital, el 80 por ciento se va directo al drenaje en actividades cotidianas como tomar una ducha, lavarse las manos o los dientes o en necesidades domésticas como el lavado de ropa y trastes, entre otros. El 20 por ciento restante es utilizado en la cocción de alimentos, limpieza de frutas y verduras, consumo humano y riego de plantas.
El cuidado y uso eficiente del agua es una responsabilidad en la que todos tenemos mucho por hacer. A continuación algunas recomendaciones sencillas para que por medio de los hábitos de consumo todos puedan contribuir a cuidar el agua.
• Revisar periódicamente las llaves del agua y las tuberías para evitar fugas.
• Cerrar las llaves del agua mientras se enjabona, se rasura o se lava las manos.
• Al lavar los trastes evite que los residuos de comida se vayan por el drenaje y enjabónelos con la llave cerrada.
• Cuando lave su ropa utilice la mínima cantidad de detergente, remoje la ropa para que sea más fácil quitar las manchas y colecte el agua del lavado y enjuague para la limpieza de pisos.
• Riegue jardines y macetas por la noche o muy temprano para evitar la evaporación.
• Recolecte el agua de lluvia para regar las plantas, limpiar la casa o el excusado.
• No arroje aceite, líquido de frenos o anticongelante al drenaje, son sustancias altamente contaminantes.
Fuente: Teorema Ambiental, imagen
