El coloso registró la cuarta erupción del año, acompañada de una columna de ceniza de casi 5 kilómetros
Teorema Ambiental/Redacción
El volcán de Fuego de Guatemala entró en actividad eruptiva la semana pasada, por cuarta ocasión en el año, después de que en junio pasado provocó la muerte de unas 190 personas.
En un boletín del Instituto de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología el coloso mostró explosiones débiles y moderadas que levantan una columna de ceniza a cuatro mil 800 metros de altura y que sobre el cráter hay dos pulsos incandescentes a unos 300 metros.
El volcán de Fuego, de tres mil 763 metros de altura y situado entre los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez, tuvo el pasado 3 de junio una de las erupciones más fuertes de su historia.
La erupción dejó “flujos de lava de mil metros en dirección a las barrancas Ceniza” y se escuchan retumbos débiles y ondas de choque que provocan la vibración de techos y ventanas de las viviendas más cercanas.
El portavoz de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, David de León, también explicó que se cerró la ruta nacional 14 como precaución, pero indicó que algunos automovilistas “no respetaron” esta medida y amenazaron a las autoridades con tomar “acciones violentas, como quemar las patrullas, si no les dejaban pasar”.