La intervención consideró la totalidad del plafón y el faldón perimetral, sumando un total de 6 mil 711 m2 de perfiles de aluminio
Teorema Ambiental/Redacción
Como celebración de sus 25 años en México la empresa Kärcher eligió limpiar este 2018 El paraguas del Museo Nacional de Antropología, un emblemático elemento arquitectónico que cuenta con una caída libre de agua. Su monumental estructura superior, que cubre una superficie de 82 por 54 metros, es soportada por cables conectados a los edificios aledaños; se sitúa entre las “cubiertas colgantes” más grandes del mundo con un área total de cuatro mil 467.5 metros cuadrados (m2).
El proyecto de mantenimiento del plafón de El paraguas, fue propuesto, desarrollado y probado por el Laboratorio de Conservación del Museo Nacional de Antropología. La intervención consideró la totalidad del plafón y el faldón perimetral, sumando un total de seis mil 711 m2 de perfiles de aluminio.
El objetivo primordial consistió en limpiar el plafón de la fuente para eliminar manchas y suciedad incrustadas en la superficie. Para proteger este monumento histórico, Kärcher seleccionó el método de limpieza con hielo seco, ya que es un nuevo sistema en restauración que brinda mejores resultados de limpieza en comparación con el limpiador de alta presión y el método de hilvanado de partículas.
Con el hielo seco no quedan restos después del proceso de limpieza, que puedan quedar pegados en los huecos del techo de El paraguas y es posible eliminar varias capas viejas de suciedad sin destruir la superficie.
Este método funciona utilizando una corriente de aire comprimido, al cual se agrega granulado de dióxido de carbono como medio de granallado. Los gránulos de hielo seco (-79 °C) se aplican a alta velocidad al objetivo de limpieza. El enfriamiento brusco de la superficie de la suciedad provoca un choque térmico y abre la corteza penetrando en la suciedad a través de estas grietas y removiéndola.
“Las ventajas de esta limpieza son que se puede limpiar sin corrosión y es mínimamente abrasiva. Otro factor importante es que se limpia sin contaminar el medio ambiente ya que no se requieren detergentes o algún otro tipo de productos químicos”, explicó Thorsten Möwes, experto en limpieza cultural.
Para este proyecto Kärcher puso a disposición del museo tres Ice Blasters IB 15/120, además de recursos financieros y personal calificado.
