Francisco Toledo presentará su primera exposición de cerámica en 20 años, la cual encabeza las actividades que prepara el Antiguo Palacio del Arzobispado como parte de la agenda de las artes visuales en el 22 Festival de México en el Centro Histórico.
La presentación incluirá las ilustraciones que hizo para el libro La muerte pies ligeros, de su hija Natalia.
Se trata de una exhibición integrada por alrededor de 40 piezas hechas de 2004 a la fecha, la cual será inaugurada el jueves 6 de abril a las 19:00 horas en el recinto que alberga el Museo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Moneda 4. Es cerámica de alta temperatura engobe y policromada.
Refuerza la presencia del artista visual y promotor cultural juchiteco una segunda exposición, La muerte saltarina, con los 39 gouaches suyos que motivaron a su hija, la poeta Natalia Toledo, a escribir el cuento que da nombre al libro bilingüe zapoteco/español La muerte pies ligeros (Fondo de Cultura Económica/Gobierno de Oaxaca), que se presentará en el mismo espacio.
La exposición de cerámica de Toledo fue programada originalmente para noviembre del año pasado, sin embargo se pospuso porque el artista seguía produciendo obra. El subdirector del Museo de la SHCP, Rafael Pérez y Pérez, explica que Toledo tenía la necesidad de mostrar un conjunto más sólido. «Él es muy riguroso. En su visión sobre su propio trabajo ha depurado obra y lo ha hecho bajo el esquema de la destrucción. Cuando no ha estado de acuerdo, le ha dado un martillazo a la pieza sin ningún remordimiento.”
Las piezas juegan con los animales de la región, que son recurrentes en su obra. Un sapo es aplastado en un metate. Un venado es cocido aún vivo en una olla. Otro sapo, montado sobre un metate, eyacula mientras mira de frente con cierta ironía. Un arca es comandada por unas ranas. Para el curador de la muestra, Toledo es un hombre que se divierte al hacer cada pieza.
Una obra en cuatro partes conforma una red donde está atrapada una langosta. De acuerdo con Pérez y Pérez, se trata de una pieza significativa porque en ella se aprecia de manera tridimensional la elaboración del dibujo.
La diversión e ironía de Toledo también se reflejan en la cerámica Madre geo. De hecho, hay una obra llamada Casas geo. Y, qué decir de una casa habitada por frijoles, vigilada por un esqueleto.
Con motivo de los preparativos para la muestra, Pérez y Pérez escribió que un primer conjunto de piezas «nos permite establecer claras antologías con el poema Indagación en torno al murciélago, de José Emilio Pacheco, dedicado a la zoología poética de algunos de los seres que nos provocan más repulsión como los murciélagos, los monos, los cangrejos o los sapos».
Fuente: La Jornada
