Agua

“Agua esperé y las políticas tarde sembré” Parte III

Sí, las tarifas, infraestructura, modernización de las redes hidráulicas forman parte de la amplia gama de métodos que deben seguirse para evitar una catástrofe por el desabasto de agua en la ciudad de México. Opiniones encontradas de expertos que fluyen en un mismo sentido: la urgente necesidad de concienciar a los habitantes del Distrito Federal.

En esta tercera parte, con la ayuda de funcionarios y expertos, hablaremos de la obligación social que como usuarios tenemos y cómo es que la nula o poca conciencia de los defeños ha desencadenado que el problema siga creciendo.

Parte III

Parte I Parte II

Alejandra Crail y Lizlenne Tiburcio

Lo que cuesta poco, se estima menos

Ciudad de México.— En el Distrito Federal no se paga lo que cuesta el agua, la ciudad tiene una de las tarifas más bajas del ámbito nacional. El gobierno local subsidia en más de 65 por ciento el abasto del líquido, un tinaco en la ciudad puede costar tan sólo dos pesos y máximo 16.

Traer agua de otras cuencas produce costos muy altos al gobierno y no a los ciudadanos, tan sólo 70 por ciento del caudal capitalino proviene de los mantos acuíferos, 25 por ciento, del Sistema Cutzamala y el resto del río Lerma.

La doctora María Luisa Torregrosa, asegura que “el agua es un bien público y los ciudadanos tenemos derechos y obligaciones respecto al recurso, el derecho de tener un servicio de calidad, agua de calidad y con frecuencia, pero para ello tenemos la obligación de pagarlo”, en referencia a un nuevo ciclo que abarca el pago por el servicio que se ve reflejado en infraestructura y mantenimiento de la red de agua.

Las soluciones inmediatas para abastecer a la población creciente son: traer el agua de otros estados o sobreexplotar nuestros ya muy dañados mantos acuíferos. Las consecuencias tangibles son el desequilibrio en la repartición del líquido y el desabasto que se observa paulatinamente en la región.

La situación genera un círculo vicioso que engloba a las autoridades y a los ciudadanos. En primer lugar, la necesidad del líquido es primordial y la sobrepoblación es imparable; en segundo lugar, el hundimiento provoca fugas que hacen que se pierdan grandes cantidades de agua; tercero, las medidas implementadas son a corto plazo. No se prevén acciones que corten este círculo que culmina en una inequidad hídrica.

Las bajas tarifas que se pagan facilitan el desperdicio, como lo dijo en una conferencia Raúl González, encargado de control de agua de Schneider Electric, “lo que no cuesta no se valora”.

La implementación de una cultura del cuidado del agua es urgente. Ramón Aguirre, director general del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACM), asevera que el mayor concienciador es el cobro y que “mientras tengamos tarifas tan bajas, la gente no valorará el servicio del agua”.

Ramón Aguirre explica que en el caso del agua no se debe tener una política de mercado porque esto alienta su consumo, lo que según él, es “ir contra la sustentabilidad de la ciudad” y por ello requieren un mayor cobro, porque consumen más.

Los procesos de obtención de agua han incrementado sus precios debido a que cada vez se tiene que excavar más profundo para conseguirla; antes las perforaciones eran de 150 metros, actualmente son de hasta dos mil.

Otra cuestión es lo que el SACM paga a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) por metro cúbico del líquido, exactamente 5.1769 pesos, cifra que no es cubierta por el pago de la población.

El agua es un derecho humano: mantener el servicio es una obligación conjunta del gobierno y los ciudadanos. Por ello debemos observar las alternativas que por parte de los expertos se ofrecen, por ejemplo: Alfredo de la Barrera, catedrático del ESIME Culhuacán, asegura que “se gasta mucho para traer el agua del Cutzamala a la ciudad y sólo se utiliza en una ocasión, es justo que si el gasto es tanto, no se utilice una sola vez sino varias veces reciclándola”.

La doctora Torregrosa propone una forma de “uso más sustentable, con tecnologías nuevas y modelos multidimensionales de gestión del agua, no sólo arreglar los tubos”.

El ingeniero Sergio Segura, director de gestión eficiente del agua en IIASA, puntualiza que “se necesitan implementar políticas que obliguen a los organismos de agua a favorecer el buen uso de lo que se dispone, que se tengan planificaciones a largo plazo, trabajar en un sistema de abastecimiento alternativo, implementar políticas que favorezcan la reducción de pérdida de agua, el monitoreo de las redes y el ahorro de consumo en los usuarios”.

Por parte del SACM y Protección Civil del DF, no están trabajando en algún recurso de descentralización para el ahorro de agua, pero asegura José Luis Hernández Dehesa, director general de prevención de Protección Civil del Distrito Federal, que una de las mejores soluciones es la sustitución de tuberías rígidas por flexibles, cosa que, dice, se ha estado haciendo de manera paulatina por el gobierno local.

Asegura José Luis Hernández que su trabajo va muy de la mano con el SACM y que de ocurrir afectaciones a la estructura hidráulica, se les da aviso de inmediato o la dependencia conoce de esto a través de sus unidades de monitoreo, y algunos expertos como Sergio Segura proponen la existencia de estas redes de monitoreo que al parecer no existen, porque las fugas son arregladas a través de avisos de la ciudadanía en su mayoría.

El jefe de gobierno de la ciudad de México, Marcelo Ebrard Casaubón, invitó a las empresas a reducir su consumo de agua en un 15 por ciento y advirtió que para este mes, “se restringirá el consumo en zonas que tienen una dotación de agua muy alta”, esto por el desabastecimiento que se espera en los próximos años ya que no se tiene suficiente agua para 2013, y si se lograra abastecer, sólo dependerá de las lluvias, informó una nota de Notimex el 22 de mayo del año en curso.

Las conclusiones de los expertos se mueven en un sentido, aumento en las tarifas y modernización de las redes que transportan el recurso hídrico. Algunos planes que propone el SACM pero a largo plazo, lo que requiere un acelere en sus procesos porque la falta de agua no se hace esperar, la necesidad ya existe y el desperdicio también, por ello esperamos la concientización de la población antes de que se implementen los aumentos en un caso desesperado por conservar aunque sea la última gota del agua en el Distrito Federal.

Teorema Ambiental

Alejandra Crail: ambiental@3wmexico.com @AleCrail
Lizlenne Tiburcio: web@3wmexico.com

Parte I Parte II

Ramón Aguirre Maria Luisa
Ramón Aguirre Alfredo de la Barrera Dra. María Luisa Torresgrosa
Ing. Edgar Segura Azpetia Ing. José Luis Hernández Dehesa

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