Teorema Ambiental/Redacción
Los camiones con motor a diésel, las camionetas de reparto y otros vehículos de flota utilizados para transportar mercancías, contribuyen de manera significativa a las emisiones de gases de efecto invernadero del sector transporte.
Por ello, la alianza a cargo del Consejo Internacional de Transporte Limpio (ICCT), con el apoyo del Instituto de Recursos Mundiales México (WRI México) y FedEx México, busca que los gobiernos federal y locales de México diseñen e implementen programas para promover el uso de flotas vehiculares más limpias que incluyan unidades eléctricas o modernicen las existentes con nuevas tecnologías.
Esto porque en el país las regulaciones vigentes requerirán que, para 2021, los nuevos vehículos pesados a diésel eliminen virtualmente sus emisiones de carbono negro y otros contaminantes. Los fabricantes ya han integrado al mercado este tipo de vehículos pero, sin programas adicionales que aceleren la transición, tener flotillas vehiculares limpias para eliminar emisiones de partículas y de carbono negro, llevará mucho tiempo, explicó la alianza en un comunicado.
“En lo general, las empresas no conocen o no valoran los beneficios de usar flotas más limpias, y se rehúsan a invertir en este tipo de unidades debido a preocupaciones sobre costos, mantenimiento y operación, y los programas voluntarios que el gobierno de la Ciudad de México y el gobierno federal han puesto en marcha para ayudar a acelerar el cambio en las flotas, han encontrado resistencia entre la comunidad empresarial o han contado con baja participación”, agrega el documento.
El proyecto Partnering for Green Growth and the Global Goals 2030 (P4G) en México, una plataforma a la que recientemente se sumó el país, por medio de las secretarías de Economía (SE), Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y de Relaciones Exteriores (SRE), para identificar e impulsar alianzas que ofrezcan soluciones innovadoras en materia de sustentabilidad, busca abordar todos los obstáculos para la adopción de tecnología por parte de las empresas y elaborar o adecuar las políticas públicas para la renovación de la flota vehicular.
La alianza desarrolla mecanismos de financiamiento que permitan a grandes flotas comerciales asociarse con microempresas para modernizar vehículos relativamente limpios y desechar los vehículos más antiguos. Además, se integrará a las autoridades locales y federales para diseñar e implementar un conjunto de políticas públicas y programas que proporcionen incentivos para la acción temprana, visibilizando las consecuencias a largo plazo de la inacción.
Por su parte FedEx México implementará una fase de demostración de la renovación y modernización de la flota vehicular, para evaluar la viabilidad económica de varios incentivos y programas disponibles. Esa información, junto con otros datos sobre el proyecto y recomendaciones de políticas públicas, se difundirá y compartirá con otros operadores de flotas, autoridades, organizaciones financieras y otros actores que trabajen para lograr flotas vehiculares más limpias en México.
Las nuevas políticas públicas sobre vehículos adoptadas en México y en otras partes del mundo, tendrán un gran impacto en la calidad del aire y el clima en la medida en que, en las próximas décadas, se transite hacia flotas vehiculares más limpias.
