Alejandra Crail
La mayoría sabemos que es prácticamente una ley que, después de cocinar, el aceite de cocina no debe echarse al fregadero, sin embargo pocos sabemos qué hacer con él después. Esta razón es la principal por la que la mayoría termina tirándolo al lavatrastos o en alguna coladera después de usarlo.
La realidad es que los restos de este aceite no representan una gran amenaza a nuestros ríos y mares, como se ha tratado de transmitir, sin embargo, la mínima colaboración que nosotros podamos aportar para reducir un poco los daños al ambiente siempre serán importantes a largo plazo.
El aceite sí es un contaminante y no debemos verterlo de manera irresponsable al drenaje ni a ningún otro lado. Así que aquí te compartimos algunas recomendaciones para que no combines este residuo con el agua.
1. Si el aceite es poco, límpialo con una servilleta y deposítalo en la basura orgánica.
2. Si la cantidad es mayor, espera a que se enfríe y colócalo en una botella de PET —incluso puedes acumularlo ahí conforme vas cocinando—. Cuando esté llena, ciérrala y entrégala en el camión de basura en el apartado de residuos inorgánicos.
3. Colando adecuadamente el aceite para eliminar los residuos, puedes reutilizarlo en la elaboración de frituras.
4. Si te interesa crear tu propio jabón reutilizando el aceite que ya dejaste, aquí te compartimos un link en donde explican cómo y con qué elaborar jabón. http://tabloide.eurofull.com/shop/detallenot.asp?notid=69
