La Profepa informó que este centro de manejo de residuos biológicos peligrosos incumplió con las medidas de sanidad mínimas para su operación
Teorema Ambiental/Redacción
Cuautinchán, Puebla, 19 de mayo de 2020.— Debido a un mal manejo de residuos peligrosos biológico–infecciosos (RPBI) almacenados en sus instalaciones, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró un centro de acopio para estos desechos, ubicado en el municipio de Cuautinchán, Puebla.
De acuerdo con un comunicado de la Profepa, esta empresa ofrecía servicios de recolección, transporte, acopio y tratamiento de residuos hospitalarios peligrosos sin contar con un resolutivo en materia de impacto ambiental, ni autorización de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para prestar servicios de incineración y esterilización de estos residuos.
Además, el almacén no cumplía con las medidas adecuadas para el almacenamiento, las cajas de refrigeración no funcionaban y los residuos rebasaban su capacidad de almacenamiento, por lo que varios de ellos se encontraban a cielo abierto y sobre suelo natural, además se encontraron evidencias de derrames de restos de sangre y otros líquidos corporales.
Este tipo de manejos representa un riesgo ambiental y de salud de la población de manera directa por lo que el centro fue clausurado e inmediatamente debe realizar la disposición adecuada de aproximadamente seis mil metros cúbicos de estos residuos en empresas debidamente autorizadas.
Además, la Profepa informó que continuará con el procedimiento administrativo hasta observar que la empresa implemente la medida de urgente aplicación y de cumplimiento a sus obligaciones que le establece regulación en materia de residuos peligrosos y la Norma Oficial Mexicana NOM-087-SEMARNAT-SSA1-2002.
Finalmente, se presentó la denuncia penal correspondiente ante la Fiscalía General de la República (FGR) por delitos contra la gestión ambiental.
