El gobierno federal mexicano está empeñado en convencer a la población de que el problema de los bosques se reduce al asunto de la tala ilegal y que la solución es endurecer las acciones policiacas sobre los talamontes, cuando esta medida representa un derroche de recursos y desvía la atención del verdadero problema que es el olvido y la pobreza extrema en que se encuentran las comunidades y ejidos que son dueñas del 80 por ciento de los bosques de México, señaló el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible (CCMSS).
La organización dedicada a la investigación y promoción del manejo forestal comunitario, criticó que la estrategia de utilizar helicópteros, aviones, imágenes de satélite y escuadrones militares para vigilar las áreas forestales no toma en cuenta que México tiene una superficie de bosques y selvas de más de 56 millones de hectáreas y que para cubrirlo con esa estrategia policiaca no bastaría el presupuesto total que se aplica al medio ambiente.
En lugar de gastar cuantiosos recursos en esta errónea estrategia, estimó el director ejecutivo del CCMSS, Sergio Madrid, debería invertirse en programas para el fortalecimiento de las iniciativas de manejo forestal de las comunidades rurales, ya que en esa medida se estará encontrando una solución de largo plazo al problema de la tala ilegal.
