El delegado de la Profepa en el estado de Tabasco, Ramiro Berrón, aseguró que Pemex desacató la clausura impuesta por la dependencia ambiental al haber seguido utilizando el gasoducto que estalló el pasado 8 de Julio.
Para obligar a la paraestatal a cumplir con la sanción, Berrón ordenó ayer al personal de la Profepa instalar sellos de clausura en el puerto petrolero Dos Bocas, situado a 30 kilómetros del lugar del accidente y punto de inicio de la instalación.
De comprobar que hubo desacato, la Profepa prevé levantar una denuncia penal ante la Procuraduría General de la República, para que ésta indague quien dió la orden de reconexión del gasoducto. Pemex desvió la transportación de gas a través de una interconexión a un oleoducto improvisado.
Pero el tubo no reúne las características ni está autorizado en materia de riesgo para transportar gas amargo. Ramiro Berrón agregó que ello es un inminente riesgo para la población al no existir medidas preventivas para usar el oleogasoducto con gas.
