Desarrollo Urbano

Afecta expansión urbana al Bosque La Primavera

Rejas metálicas instaladas en el área natural protegida impactan negativamente los corredores de fauna silvestre, en especial a los mamíferos (venados, zorros, coyotes, mapaches, tejones, comadrejas, zorrillos, linces y pumas) e incluso a las aves rapaces y otras como los correcaminos y codornices

GUADALAJARA, JAL.— Basta caminar unos cuantos metros en el Bosque La Primavera para toparse con una enorme cerca metálica. Y así, conforme se avanza entre los estrechos caminos de esta reserva natural, son más y más las rejas que lo fragmentan. Las bardas, colocadas de manera discrecional por los propietarios del bosque, son en la mayoría de los casos olvidadas por las autoridades, pese a las denuncias que rebasan su capacidad de inspección, pero al mismo tiempo no actúan contra los dueños que las colocan.

El caso más reciente y donde la delegación Jalisco de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), no ha dictaminado una sanción, es la malla metálica de más de dos metros de altura instalada por Ramón Sánchez, en su predio que renta para acampar.

Por lo menos una decena de cercas han sido colocadas a lo largo de este año y ninguna ha sido retirada, señala la dirección del Bosque La Primavera. Todas se quedan. Parece que las mallas comienzan a formar parte del entorno del área natural protegida, abonando a retrasar su conservación y acelerar su deterioro, pues este tipo de infraestructura impide el libre paso de la fauna y evita la regeneración del suelo.

Hay rejas que han sido reforzadas con base de cemento, mientras otras son de pura y firme piedra donde en su parte final, ponen trozos de vidrio para impedir la entrada de personas, pero al mismo tiempo ocasionan la pérdida de aves.

Desde que La Primavera fue decretada área protegida, en 1980, se prohíbe la instalación de cualquier construcción que dañe el bosque. Empero, este decreto federal no ha sido suficiente para frenar las estructuras.

Entre las autoridades la poca coordinación ha sido evidente. Mientras la dirección del bosque asegura que cada una de las irregularidades es denunciada, en la Profepa niegan recibir quejas. Y ni qué decir de la regulación municipal que ni siquiera hace presencia en estos casos.

Pese a que La Primavera es el área verde más importante de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG), el proyecto de Presupuesto 2008 contempla una partida de 4.5 millones de pesos para la protección de sus 30,500 hectáreas protegidas.

Esta cantidad representa menos de una cuarta parte prometida por el gobernador Emilio González Márquez, en la reunión que sostuvo en Casa Jalisco para realizar un plan de acción para el bosque, donde se comprometió a destinar 18 millones de pesos.

Aunado a la colocación de alambrados, están las remodelaciones y ampliaciones de fincas sin permiso alguno, sus dueños hacen lo que se les antoja.

El caso más reciente, es la construcción de una nueva casa en la zona denominada “La Cebada”. Se trata de una vivienda de dos pisos de altura rodeada por árboles de todos tamaños, que aún no concluye. Y mientras tanto, innumerables terrenos se ponen a la venta, con falsa promesa de que es el lugar idóneo para levantar una majestuosa casa.

El Informador

Suscríbete al Boletín

PAÍSES QUE NOS ESTÁN VIENDO