Aproximadamente 40 mil toneladas de cromo hexavalente, químico tóxico sepultado en la colonia Lechería, en Tultitlán, Estado de México, deben trasladarse al confinamiento químico ubicado en el municipio de Mina, estado de Nuevo León, anunció la secretaria de Ecología del Estado de México, Arlette López Trujillo, quien informó sobre la conclusión de la etapa de investigación en Cromatos de México.
Durante la etapa de estudio para cuantificar el cromo hexavalente sepultado en terrenos de lo que fue la fábrica de Cromatos de México en Lechería, una de las tumbas químicas más grandes del país, investigadores alemanes determinaron la existencia de 35 mil a 40 mil toneladas de este tóxico.
López Trujillo indicó que durante más de dos décadas no se hizo nada para sanear y cuantificar esta fuente de contaminación.
Cromatos de México, una empresa de capital alemán que elaboraba sustancias químicas para cromar, se instaló en Lechería en 1958 y funcionó hasta 1976, durante este tiempo generó más de 75 mil toneladas de cromo hexavalente, que fue sepultado en la zona en 1983.
Desde entonces, la tumba química ha causado enfermedades como leucemia y cáncer a los pobladores de esta colonia. Además, cerca de 300 personas, habitantes de Lechería y obreros de Cromatos de México, se sometieron en la década de 1980 a análisis de orina y cabello, que realizaron investigadores de la UNAM, quienes encontraron concentraciones de cromo hexavalente por encima de la norma.
Teorema Ambiental / 2000 Agro
