Los productos para el aseo, las pinturas, los pesticidas, los polvos y todos los elementos de uso diario para limpieza, afectan la salud de manera paulatina
Barcelona.— Algunos químicos como los desodorantes, perfumes, cremas para la piel, aerosoles de uso diario y hasta zapatos, contienen elementos tóxicos que han conseguido llegar a la sangre humana, afectando la salud con enfermedades como cáncer, asma, parkinson, enfermedades autoinmunes, problemas cognitivos en los niños, alergias, diabetes, infertilidad y el síndrome de Sensibilidad Química Múltiple (SQM) que todavía no lo consideran una enfermedad, entre otros.
“Prácticamente el 100 por ciento de los habitantes de los países occidentales (…) tenemos en nuestros cuerpos concentraciones de numerosos compuestos tóxicos peligrosos como el hexaclorobenceno, el lindano, los PCB, y otros muchos”, asegura el presidente del Fondo para la Defensa de la Salud Ambiental, Carlos Prada.
Los productos para el aseo, las pinturas, los pesticidas, los polvos y todos los elementos de uso diario para limpieza, mantenimiento e higiene personal, son respirados y así absorbidos por la sangre, afectando la salud de manera paulatina. Por ello, aquellas personas que no trabajan en fábricas o que no viven en grandes urbes, también están expuestas a una gran cantidad de contaminantes que en algún grado pueden ser nocivos para la salud.
Bisfenol A, ftalatos —que pueden tener efectos de alteración hormonal—, retardantes de llama, organofosforados —un grupo de químicos usados como plaguicidas artificiales aplicados para controlar las poblaciones de insectos—, metales pesados, alquilfenoles y disolventes, forman parte de la larga lista de sustancias que han conseguido llegar a la sangre de la mayoría de los ciudadanos.
Estos químicos tóxicos que se encuentran en nuestros hogares, son los que provocan una de las tantas enfermedades mencionadas, pero con señalada importancia en el SQM, síndrome que impide a quienes lo padecen, vivir en casas con aerosoles, desodorantes y otros elementos contaminantes, a menos que utilicen siempre una máscara de oxígeno, porque el aire que nosotros respiramos, es aún más nocivo para ellos.
Gracias a esto, el Parlamento Europeo ha tomado medidas preventivas por medio de una iniciativa que apoyan otros europarlamentos para conseguir que la SQM sea reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como enfermedad, tal como se he hecho en Alemania, Francia, Austria y Luxemburgo, ya que este síndrome se incrementará en los próximos años si no se toman medidas.
Teorema Ambiental
(Con información de: LAVANGUARDIA.COM)
