Contaminación

En abril acusaron a Caresa de rellenar terrenos con lodos que contienen diesel

Aproximadamente 300 familias del municipio de Cunduacán exigieron a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) que detenga los trabajos de la empresa Consorcio de Arquitectura y Ecología (Caresa), la cual rellena un predio de la ranchería Plátano y Cacao con lodo contaminado con hidrocarburos, lo que ha perjudicado tierras de cultivo y pozos.

Activistas afiliados a la Asociación Ecológica Santo Tomás y al Comité de Derechos Humanos de Tabasco, quienes asesoran a los colonos afectados, afirmaron en entrevista que los habitantes de Plátano y Cacao presentaron su primera queja contra Caresa el 20 de abril.

El coordinador general de Santo Tomás, Elías Sánchez Pérez, dijo ignorar «si con la complacencia de la Profepa, o burlándose de esa autoridad ambiental», Caresa continúa con sus trabajos, pese a que no cumple las condiciones que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) le impuso.

Un documento entregado a La Jornada menciona que la primera protesta quedó asentada en los archivos de la Profepa, en el expediente PFPA/TAB/DQ/78/0055, a partir del cual la dependencia ordenó investigar las obras en Plátano y Cacao.

Durante las pesquisas Caresa presentó a la Semarnat el proyecto de relleno y nivelación del terreno. Posteriormente personal técnico de la Profepa «tomó muestras de las tierras que fueron utilizadas para el relleno del área del proyecto». Días después, la Semarnat analizó el material y en un documento que emitió el 3 de junio indicó que en el terreno de Caresa había «concentración de hidrocarburos totales de petróleo de la fracción diesel», lo que afecta la actividad agrícola.

Sánchez Pérez explicó que se ordenó a la empresa realizar la «limpieza y remediación» del predio, a fin de prevenir la contaminación de los mantos freáticos. No obstante, el lodo sigue contaminando el agua y los cultivos de la zona, y los habitantes exigieron a las autoridades federales detener los trabajos de Caresa.

Fuente: La Jornada

Suscríbete al Boletín

PAÍSES QUE NOS ESTÁN VIENDO