Colaboraciones

Prácticas empresariales para una producción más limpia

Por: M.B.A. Mario Amador*

La idea principal de la producción más limpia es que debe impactar los procesos, productos o servicios de una organización, por lo que va a existir un cambio en la tecnología aplicada, la infraestructura física de la organización o en sus procedimientos (formas actuales de trabajo).

Dentro del rubro de procesos, la producción más limpia se enfoca hacia la conservación y mejor uso de materias primas, insumos (agua y energía), reducción, minimización o eliminación de la cantidad y toxicidad de emisiones. Dentro del rubro de productos se refiere a la reducción de los impactos ambientales negativos a lo largo de todo el ciclo de vida de estos productos, desde su diseño hasta su disposición final. Dentro del rubro de servicios se aborda a la prestación de los mismos, considerando su impacto ambiental. Bajo esta premisa cada empresa planea las acciones de producción más limpia (P+L) por seguir, según sus necesidades y prioridades.

Uso de tecnología más limpia

Existen dos tipos de tecnologías: la “dura”, que se enfoca a todo tipo de maquinaria, equipos, dispositivos y procesos, y la “blanda”, que se enfoca al conocimiento especializado, el capital humano y la forma en que la organización trabaja para la implementación de las mismas; por lo anterior se puede afirmar que la tecnología más limpia busca reemplazar aquella tecnología obsoleta por una adecuada a los requerimientos de producción industrial. Así, por ejemplo, en el área de horneado se puede implementar maquinaria o equipos de nueva generación que permitan el mejor uso de materias primas, menor tiempo de producción y acabados excelentes, garantizando de esta manera la calidad que se entrega al cliente y cuidado de la salud de los operarios.

Minimización y manejo adecuado de residuos

Se enfoca a emplear alternativas que analiza desde el origen de los productos o inicio de los procesos de producción, hasta que se llegue a la fase final de los mismos, y de esta forma se aseguren que el ambiente no se verá impactado negativamente por la excesiva generación o inadecuado manejo de residuos, algunas veces llamados “subproductos”. Así, una organización puede mejorar el uso de sus materias primas mediante el empleo eficiente de materiales y fuentes energéticas menos tóxicas, de la sustitución de materias primas no renovables por otras de carácter renovable, de la implementación de procedimientos de reciclaje para el reúso de materiales, y la utilización de tecnologías de control al final de los procesos productivos y administrativos para tratar los residuos generados y asegurar su correcta disposición final.

Mejora continua de los procesos operativos

Este apartado se enfoca en el uso de mejores prácticas de operación y/o administración, en las que todos los niveles y áreas de la organización se ven involucradas, siempre teniendo en cuenta que diversas prácticas se relacionan directamente con otros sistemas de gestión que la empresa está realizando como la norma ISO 9000 (Aseguramiento de Calidad) o la ISO 14000 (Gestión Ambiental).

Una de las acciones más importantes en este aspecto se relaciona con la capacitación del personal sobre los métodos y condiciones de los procesos, la elaboración de manuales de operación y procedimientos, conocimiento del control de inventarios, almacenamiento y de calidad de materias primas, conocimiento y aplicación de programas de producción de nueva tecnología y/o el mantenimiento preventivo de maquinaria, equipos o herramientas.

* Consultor Ambiental Senior

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