Redacción Teorema Ambiental
Marcando otro hito negativo, científicos informaron este miércoles que en 2016 la Tierra alcanzó su temperatura más alta registrada, arriba de lo registrado en 2015. Es la primera vez en la era moderna del calentamiento global que las temperaturas han rebasado el récord anterior en tres años consecutivos, indica The New York Times.
Los datos muestran que los políticos no pueden desear que el problema desaparezca. La Tierra se está calentando, un punto mucho más allá de controversia científica seria. Las temperaturas se dirigían a niveles que muchos expertos creen que van a suponer una amenaza profunda tanto al mundo natural y para la civilización humana.
En 2015 y 2016, el calentamiento planetario se intensificó por el patrón climático conocido como El Niño, en el que el océano Pacífico libera una enorme explosión de energía y vapor de agua en la atmósfera. Pero el factor más importante fue la tendencia a largo plazo del aumento de la temperatura, que según los científicos está siendo impulsado por el aumento de los niveles de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero.
“Un año más cálido solo es una especie de curiosidad”, dijo Deke Arndt, jefe de vigilancia del clima mundial para la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos. “Es realmente la tendencia, y el hecho de que estamos perforando el techo cada año, que es el verdadero indicador de que estamos sometidos a grandes cambios.”
Las condiciones extremas de calor fueron especialmente resentidas en el océano Ártico, con temperaturas en el otoño que fueron de entre -6.6 a los -1.1 grados centígrados, por encima de lo normal. El hielo marino en esa región ha estado en declive y las comunidades del Ártico ya están luchando con enormes problemas, como la rápida erosión costera, causada por el cambio climático.
“¿Lo que está pasando en el Ártico es realmente muy impresionante; este año era ridículamente fuera de la tabla”, dijo Gavin A. Schmidt, jefe del Instituto Goddard de Estudios Espaciales en Manhattan, una unidad de la Administración Nacional de la Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), que rastrea las temperaturas globales.
Pero la gente del Ártico no fue la única en resentir el calor. La sequía y la hambruna afectaron otras regiones. El 19 de mayo, la gente en la ciudad de Phalodi en la India vivió el día más caluroso en la historia de ese país, con una temperatura de 51 grados centígrados.
El Niño ha finalizado, y los científicos del clima casi universalmente esperan que 2017 sea mucho más frío que el año anterior. Pero la escala de la ráfaga de calor ha sido sorprendente para muchos de los expertos, y algunos de ellos temen una era acelerada de calentamiento global en los próximos años.
Con las temperaturas actuales, miles de millones de toneladas de hielo se están derritiendo en el océano, mientras que el mar también está absorbiendo la mayor parte del calor generado por las emisiones humanas. Esos factores están aumentando el nivel del mar a un ritmo acelerado y las comunidades costeras de Estados Unidos están gastando miles de millones de dólares para luchar contra el aumento de las inundaciones de las mareas.
