El gerente regional de la Comisión Nacional Forestal, Santiago Pinzón Lizárraga, señaló que Stan, Emily y Wilma dañaron en conjunto unas 1,315 hectáreas, por lo que dejaron el peor panorama de las últimas décadas.
Para prevenir y enfrentar los riesgos de incendios forestales, agregó, se ha diseñado una serie de acciones, entre las que destaca la construcción de brechas con maquinaria y los recursos que por 10 millones de pesos ejercerá la Comisión Nacional de Zonas Áridas para construir caminos cortafuego en la península de Yucatán con el fin de resguardar a la población en caso de incendios forestales.
Además, se duplicarán los campamentos con equipo especializado en los siniestros forestales. Habrá más vehículos, herramienta y cuando menos cinco helicópteros cisterna. Cuatro en Quintana Roo y uno en Mérida.
En opinión del funcionario de la Conafor, el reto al que se enfrentan es convencer a los agricultores y campesinos que dejen las quemas agrícolas que son la causa de la mayoría de los incendios.
Fuente: El Universal
