De acuerdo con el gobierno municipal, se estima que a la fecha hay 1.5 millones de huevos incubando en las playas de la isla
Teorema Ambiental/Redacción
Cozumel, Quintana Roo, 31 de julio de 2020.— Debido al confinamiento por COVID-19 en el país, actualmente las playas paradisíacas del Caribe mexicano están libres de humanos, por lo que las tortugas marinas han aprovechado para hacer nidadas mucho más masivas a las registradas en los últimos años.
Un ejemplo es en la isla de Cozumel donde se encuentra un santuario natural para depositar huevos, registra un número récord de desoves, con entre 100 y 150 arribos diarios, solo en dos playas, es decir, el 30 por ciento de las playas monitoreadas en el mismo periodo de 2019.
La ausencia de humanos hace sentir más tranquilas y seguras a las tortugas. De acuerdo con el gobierno municipal, al 25 de julio se tienen registrados cuatro mil 100 nidos, 63 por ciento más comparado con el mismo periodo de 2019, cuando se contabilizaron dos mil 554 nidos. De hecho, la autoridad de Cozumel estima que el número real de nidos supera los 13 mil 500, pues el 70 por ciento de las playas de la isla se quedan sin registrar.
“Hasta el momento se han liberado más de ocho mil crías de quelonios, cinco mil más en comparación con el mismo periodo de 2019”, agregó el ayuntamiento en un comunicado. “En lo que va de la temporada y con las consideraciones anteriores se estima que en este momento existen alrededor de 1.5 millones de huevos incubando en playas de Cozumel y se espera que más de 15 mil tortugas de la generación 2020 regresen a desovar por primera vez en el 2040.”
“Agradezco el esfuerzo que hacen las brigadas conformadas por el Comité Municipal de Protección a la Tortuga Marina, para cuidar y proteger a esta especie que ha encontrado en Cozumel un santuario natural para su reproducción. Sabemos que son tiempos difíciles por la pandemia de COVID-19, pero no debemos descuidar los programas para su conservación”, dijo el edil Pedro Joaquín Delbouis.
Destacó que “lo que vemos hoy es el resultado del constante e incansable trabajo que durante 32 años ha realizado el Campamento San Martín” hoy a cargo del subdirector de Ecología, Fernando Pola Rodríguez, y el técnico de campo Édgar Sosa Coral, finalizó.
