Biodiversidad

Conoce más sobre la extraña biodiversidad que habita en Australia

Muchas especies resultan interesantes, algunas de ellas letales, pero la mayoría son extrañas para quienes viven fuera de la isla

Teorema Ambiental/Redacción

Ciudad de México, 25 de mayo de 2020.— Aunque existe el mito de que en Australia habita la mayor cantidad de animales letales del mundo, lo cierto es que hay muchas especies que resultan interesantes, algunas de ellas letales, pero la mayoría son extrañas para la gente que vive fuera de la isla. Estas son algunas de ellas:

Casuario

Se trata de la segunda ave más pesada del mundo: puede alcanzar dos metros estando de pie y pesar 60 kilos, tiene plumaje negro en el cuerpo, azul vivo en el rostro y una extraña estructura en forma de cuerno que tiene en la cabeza, conocida como “casco”.

En sus poderosas patas, cada dedo interior posee una enorme garra de hasta diez centímetros, con la cual es capaz de herir a cualquier potencial predador. Además, puede correr a una velocidad de 50 kilómetros por hora y saltar a una altura de dos metros. Sin embargo, es muy difícil encontrar un casuario en estado salvaje. Viven en bosques tropicales, al norte de Australia y en Nueva Guinea.

Pulpo de anillos azules

Se trata de una familia de varias especies que miden apenas diez centímetros con los tentáculos abiertos, son bastante tímidos y en su cuerpo se proyectan círculos en tonos fluorescentes. Sin embargo pueden ser letales cuando se sienten amenazados.

Son considerados entre los animales marinos más peligrosos que existen. Entre sus características comunes están: la presencia de sus anillos. Viven en costas rocosas y profundidades de máximo 15 metros, desde el mar de Japón hasta el sur de Australia.

Poseen un veneno paralizante llamado tetrodotoxina, el cual les sirve para matar cangrejos y pequeños peces. Si atacan a un humano, no se sentiría su “mordida” porque es “sutil”, pero en unos minutos se adormecen los labios y la lengua, posteriormente se dificulta la respiración y después podrías escuchar todo lo que pasa a tu alrededor sin lograr responder. No obstante, no son animales agresivos, y solo atacan al manipular su cuerpo.

Cocodrilo de agua salada

Es el reptil más grande del planeta, con una longitud de hasta 6.5 metros y peso de una tonelada aproximadamente. Además, su mordida se considera como la más fuerte del mundo animal. Sus dientes miden hasta 13 centímetros de largo y puede permanecer bajo el agua durante varios minutos, por lo que es un hábil cazador. A diferencia del resto de los cocodrilos del mundo, que suelen evitar confrontarse con humanos, este espécimen destaca por su agresividad.

Sin embargo es un ejemplar de gran interés para la ciencia, pues prácticamente no ha evolucionado desde la época de los dinosaurios. Vive en aguas de poca salinidad y en ecosistemas como manglares.

Araña de Sídney

Esta especie (Atrax robustus es su nombre científico) es conocida por la toxicidad de su veneno y porque es relativamente frecuente que se encuentre con humanos, lo que aumenta su peligrosidad. Sin embargo, no se han reportado muertes provocadas por la picadura desde 1981, cuando se creó su antiveneno.

El veneno del macho de la especie contiene un componente llamado robustoxina que afecta el sistema nervioso de humanos y simios, pero no de otros mamíferos. Puede encontrarse en zonas suburbanas de Sídney, pero también en otras ciudades de Nueva Gales del Sur, como Newcastle, Nowra y Lithgow.

Cubomedusa de Australia

Cada ejemplar de esta especie es capaz de matar a 60 personas con su veneno. Su “picadura” produce un dolor agudo, necrosis en la piel y en una dosis suficiente, puede provocar un paro cardiaco o la muerte. Es una medusa larga y transparente, con 60 tentáculos que pueden medir hasta tres metros.

Vive cerca de las costas, desde Australia Occidental hasta Queensland a través del Territorio del Norte de la isla. En mayo de 2019 investigadores de la Universidad de Sídney descubrieron un antídoto que bloquea su veneno si se aplica en los primeros 15 minutos tras la picadura.

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