Se reúnen representaciones de Gran Bretaña, Irlanda del Norte y Dinamarca para combatir el cambio climático, con nuevas estrategias de negocios
CIUDAD DE MÉXICO.— Uno de los mayores problemas que enfrentan los gobiernos del mundo es el cambio climático. Más que preocupados, sino ocupados en combatirlo, la Embajada de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte y la Embajada Real de Dinamarca en México organizaron la conferencia Cambio Climático, Competitividad para los Negocios.
Las representaciones de estos países europeos reunieron en la ciudad de México a un grupo de expertos que opinaron y dieron ideas para combatir este problema global, con nuevas estrategias de negocios y tecnologías de vanguardia.
La embajadora británica, Judith MacGregor urgió a los países y a las empresas a que se tomen acciones de manera inmediata en pro de la economía mundial, pero sobre todo, del medio ambiente. “Para el Reino Unido el cambio climático es un tema permanente en nuestra agenda. Aquí desarrollaremos ideas y veremos casos de éxito para que podamos mejorar en esta materia”, dijo.
En una participación de 30 minutos en el foro, el mexicano premio Nobel de Química, Mario Molina, mencionó que es una prioridad para los países en desarrollo, como México, el comenzar un cambio radical en los negocios, buscando una economía verde que se vea beneficiada por los países que son potencia mundial.
“La tecnología ya la tenemos, ahora debemos comenzar a trabajar en instaurarla. Si no se combarte al cambio climático, jamás podremos disminuir problemas tan graves como la pobreza o la desnutrición… todo va directamente vinculado.”
Así, los empresarios mexicanos, ingleses y daneses, discutieron nuevas ideas, enfocadas principalmente al ahorro de energías, así como la mejor aplicación de los recursos para obtener mayores ganancias económicas y frenar el aumento en la temperatura promedio del planeta.
La conclusión principal, desarrollar las fuentes de energía alternas aplicadas directamente a la industria para depender menos del petróleo y sus derivados, algo que, según el Nobel mexicano, es posible desde hoy.
Fuente: Terra
