Biodiversidad

Identifican a rana como el primer anfibio polinizador conocido por la ciencia

  • Recientes investigaciones realizadas en Brasil han dado a conocer una nueva especie de anfibio que cumple con esta tarea: una minúscula rana arborícola de la selva amazónica

Teorema Ambiental/Redacción

A diferencia de la mayoría de las ranas arborícolas, que se dedican a acechar a los insectos durante la noche, esta pequeña rana de color naranja se alimenta de diversas partes de las plantas, como flores, frutas y néctar. Este comportamiento podría convertirla en el primer anfibio polinizador conocido, lo que ampliaría el número de especies que realizan esta vital función biológica.

Este hallazgo supone una prueba más de la necesidad de expandir nuestra comprensión de los agentes polinizadores, más allá de ciertas aves e insectos.

En diciembre de 2020, durante una visita a la localidad brasileña de Armação dos Búzios, los investigadores observaron que un grupo de estas ranas arborícolas se alimentaba de las flores del árbol de la fruta de leche (Cordia taguahyensis), especie autóctona de Brasil.

En dicha observación, notaron que una de las ranas se desplazaba entre las flores en busca de néctar, apareciendo poco después con granos de polen adheridos a su húmeda espalda.

Esta situación llevó a los científicos a plantear la hipótesis de que el anfibio podría desempeñar un papel polinizador al transportar el polen de flor en flor, facilitando la reproducción del árbol. A este fenómeno se suma el hecho de que ya se le había observado como dispersor de semillas.

El consumo de néctar durante su temporada reproductiva podría resultar beneficioso para algunos ejemplares de estas ranas, especialmente cuando se encuentran bajo una demanda energética elevada.

Estos descubrimientos fueron publicados por los investigadores brasileños en un artículo titulado “Between fruits, flowers and nectar: The extraordinary diet of the frog Xenohyla truncata” en la revista científica Food Webs.

“Algunas especies de ranas habían sido fotografiadas en flores, pero ninguna había sido vista interactuando con una flor”, afirma Carlos Henrique de Oliveira-Nogueira, autor principal del artículo.

Si bien este descubrimiento representa un paso alentador, otros investigadores consideran que se necesita más investigación para confirmar que las ranas son realmente polinizadoras.

Futuros estudios deberán incluir un monitoreo a largo plazo de las flores, utilizando cámaras o jaulas para las ranas, para evaluar si las flores del árbol de la fruta de leche tienen más dificultades para reproducirse cuando las ranas no pueden acercarse a ellas.

Asimismo, se necesitan respuestas a ciertas preguntas. Por ejemplo, si las secreciones en la espalda de las ranas pueden dañar el polen, o si las ranas visitan un número suficiente de flores como para influir en la reproducción de los árboles.

Este fenómeno de posible polinización a través de las ranas ilustra cómo, al realizar trabajo de campo, se pueden descubrir interacciones inesperadas. En la última década se ha presenciado un aumento en el descubrimiento de nuevas especies polinizadoras, entre las que se incluyen algunos lagartos y lagartijas, así como zarigüeyas, ratas y cucarachas.

Muchos de estos hallazgos han sido posibles gracias al uso de tecnología, como cámaras trampa, dispositivos que han permitido captar a especies de comportamiento reservado en pleno acto. Un ejemplo es la polinización realizada por un lagarto en Sudáfrica, que nunca había sido presenciada directamente por un humano, y solo se conoció a través de un video.

El hecho de observar a la ranita arborícola es una visión fascinante de una especie cuyo hábitat no se respeta, asegura De-Oliveira-Nogueira. La mayoría de la gente la ve simplemente como una rana más. En Brasil, las ranas que se acercan a los asentamientos humanos, incluida la Xenohyla truncata, a menudo tienen finales trágicos debido a sus depredadores, como los gatos o los mismos propietarios de las casas.

No obstante, este hallazgo podría ser un punto de inflexión. Se trata de una especie amenazada que podría ser la única especie de anfibios en el mundo con una función de polinización. De este modo, si perdemos esta especie, perderemos una interacción ecológica única entre plantas y anfibios.

Con información de UNAM Global

Fotografía: pxhere.com

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