“Protección social y agricultura: para romper el ciclo de la pobreza rural”
México, D.F.— El Día Mundial de la Alimentación pretende crear conciencia acerca de los problemas relacionados con la alimentación y nutrición, esta celebración fue creada en 1981 por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) con el fin de reforzar el mensaje sobre la importancia de mantener una alimentación saludable, segura, asequible y de calidad diariamente.
Para 2015 se eligió el tema “Protección social y de agricultura: para romper el ciclo de la pobreza rural”. La alimentación saludable, uno de los pilares de la fecha, es una preocupación constante.
Como regla general los alimentos deben ser seleccionados, almacenados, manejados, limpiados y preparados adecuadamente para evitar la contaminación y proliferación de microorganismos dañinos que son perjudiciales para la salud y que causan enfermedades. De acuerdo con la FAO, estás enfermedades amenazan la salud de más de dos mil millones de personas alrededor del mundo cada año.
Debido a su forma de cultivo las frutas, verduras, hortalizas y verduras tienen una alta carga de contaminantes. Para garantizar la calidad y seguridad de estos alimentos son muy importantes los esfuerzos para mantener el saneamiento adecuado del entorno en el que se manejan y de quién los maneja.
Ecolab es una empresa mundial en tecnologías y servicios de agua, higiene y energía; una de sus tareas es garantizar las prácticas de seguridad en la producción, manejo, preparación y almacenamiento de los alimentos.
Pero también se puede contribuir a esta causa y para ello, a continuación te compartimos algunos consejos esenciales de higiene que ayudarán a mejorar nuestra alimentación y a evitar riesgos a la salud causados por la falta de higiene personal y en alimentos:
1. Lávate las manos antes de preparar o manipular alimentos. No adoptar esta práctica es una causa importante para contraer enfermedades transmitidas por los alimentos.
2. No laves el pollo antes de la preparación. Según los investigadores, enjuagar el pollo con agua corriente aumenta el riesgo de contaminar con microorganismos transmisores de enfermedades.
3. No volver a higienizar los alimentos envasados que han sido objeto de limpieza. Frutas, hortalizas y verduras limpias (mínimamente procesadas) y envasadas no necesitan ser lavadas nuevamente.
4. Usa un termómetro para comprobar la temperatura de los alimentos desde su recepción hasta la exposición. No asegurar la temperatura correcta de los alimentos en toda la cadena de producción puede facilitar la contaminación y proliferación de microorganismos.
5. Congela los alimentos a temperaturas adecuadas. La temperatura de los refrigeradores y congeladores es un factor importante para la prevención de la contaminación y proliferación de microorganismos en los alimentos y la eliminación de posibles riesgos.
Fuente: Teorema Ambiental, imagen
