Unas cien mil familias campesinas, donde el jefe de familia sea mayor de 65 años de edad, y posean menos de cinco hectáreas de tierra, podrán ser afiliadas al Seguro Popular, que entrará en vigor para 2004, anunció Julio Frenk Mora, secretario de Salud.
Cada campesino con su familia, beneficiario de Procampo, pagará una cuota de 22 pesos mensuales y podrá obtener el servicio médico del IMSS-Oportunidades, mismo que ampliará a cerca de cuatro mil el número de plazas de personal para atender en especial a los grupos campesinos e indígenas del país.
La medida, sin embargo, ha generado problemas de saturación en hospitales, ya que no cuentan con el personal necesario para atender con calidad a todos los que demandan el servicio.
Para poder ser beneficiario del Seguro Popular, los productores deben residir en cualquiera de los ocho estados que firmaron el convenio: Campeche, donde se pretende afiliar a ocho mil familias; Tampico, con 17 mil familias; San Luis Potosí, con 20 mil, y Baja California, Guanajuato, Sinaloa, Sonora y Zacatecas, con diez mil familias cada uno.
