Los daños ambientales ascienden a 1,040 millones de pesos
De acuerdo con las iniciativas de reforma energética presentadas por el presidente Vicente Fox, la infraestructura de Petróleos Mexicanos ha registrado en el ultimo año 700 fugas, con un costo de 1,040 millones de pesos.
De acuerdo con las iniciativas de reforma energética presentadas por el presidente Vicente Fox, la infraestructura de Petróleos Mexicanos ha registrado en el ultimo año 700 fugas, con un costo de 1,040 millones de pesos.
En las reformas a la Ley Reglamentaria del Artículo 27 de la Constitución en el Ramo Petrolero y Ley de la Comisión Reguladora de Energía, Fox alerta: «De 700 fugas en Pemex (…) varias han derivado en verdaderos desastres, ante todo por la pérdida lamentable de vidas humanas y, además, en virtud de los daños irreparables al medio ambiente.»
México cuenta con una red de ductos que alcanza los 41,800 kilómetros, con una edad promedio de 25 años de operación, cuyo mantenimiento «no ha sido suficiente. Durante 2005 se han registrado fugas y daños ecológicos en Nanchital y Coatzacoalcos, en Veracruz; Xicotepec, Puebla, y Villahermosa, Tabasco.»
Mientras, en las iniciativas de reforma a los artículos 27, párrafo sexto, y 28, párrafo cuarto, de la Constitución, el presidente ratifica que «Petróleos Mexicanos no se vende» y precisa que las reservas de gas natural no cubren la demanda que se requiere para la generación de energía eléctrica: «La propuesta va dirigida a transitar de un régimen de exclusividad a uno prioritario, donde concurran los sectores público, social y privado en la realización de las actividades de explotación de gas natural no asociado al petróleo.»
La satisfacción de la demanda de gas natural «impone un reto de incrementar su disponibilidad en más de 5,100 millones de pies cúbicos por día en los próximos ocho años, con respecto a la producción actual, volumen que supera el consumo actual de países como Argentina, Venezuela, Brasil, España, Francia, Holanda, entre otras naciones».
«Hoy, la soberanía energética no está en la explotación exclusiva de los recursos naturales por organismos del Estado, sino que depende de la capacidad de la sociedad para armonizar los intereses públicos y privados en torno del aprovechamiento de los recursos naturales, para satisfacer sus requerimientos de energía», señala el documento.
Las iniciativas de reforma a la Constitución relacionadas con el gas natural no asociado al petróleo plantean entre otros beneficios: la satisfacción de la demanda interna de gas natural a menores precios para el consumidor; suministro confiable de gas para la generación de energía eléctrica; reactivación del crecimiento económico.
Fuente: El Universal
