Entre enero y septiembre de este año, se registraron 11 mil 197 tomas clandestinas, que representan 46 % más en comparación al mismo periodo del año pasado
Teorema Ambiental/Redacción
Durante la administración que está por concluir, Pemex registró 40 mil 71 tomas clandestinas, siete veces más que en el periodo anterior, por lo que el gobierno de Enrique Peña Nieto se convirtió en el periodo con mayor número de ataques a la red de ductos de hidrocarburo en la historia.
El delito de robo de combustible se ha convertido en un nicho importante de negocios para el crimen organizado en estados como Puebla, Hidalgo, Guanajuato, Veracruz y el Estado de México, y es una de las principales preocupaciones para los empresarios gasolineros, pues el producto robado se vende en el mercado negro y en algunas zonas ya representa entre el 30 y 40 por ciento de las ventas.
Entre enero y septiembre de este año, se registraron 11 mil 197 tomas clandestinas, que representan 46 por ciento más en comparación al mismo periodo del año pasado, de acuerdo con información publicada por Excélsior. Pero si se suman las perforaciones ilegales registradas de diciembre de 2012 a septiembre de este año, se han superado las 40 mil tomas clandestinas.
Mientras que en el periodo de Felipe Calderón se registraron cuatro mil 701 tomas, lo que equivale a un aumento de 752 por ciento. En tanto, en el gobierno de Vicente Fox se documentaron solo 887 tomas clandestinas.
A principios de este sexenio, Tamaulipas era señalado como el estado con mayor índice de huachicoleo. Sin embargo, en los últimos dos años, Puebla e Hidalgo son las entidades con mayor incidencia. En enero-septiembre de este año, Puebla tuvo un aumento de 79.4 por ciento, con mil 636 tomas, siendo el estado con más ataques a la infraestructura de Pemex para la conducción de combustible.
Hidalgo se mantuvo como la segunda entidad con más tomas clandestinas (mil 486), es decir, 103 por ciento más que las 731 registradas en el mismo periodo de 2017.
Guanajuato está en el tercer sitio con mil 350 tomas, mientras que Veracruz se posicionó en el cuarto con mil 219 perforaciones.
Para contrarrestar la situación, el gobierno modificó la Ley Federal para Prevenir y Sancionar los Delitos Cometidos en Materia de Hidrocarburos. En ella se estipula que las personas que roben combustible recibirán una pena de hasta 30 años de prisión y multas de 20 mil a 25 mil unidades de equivalencia.
