- Este equipo que está valorado en aproximadamente 93 000 dólares, tiene la capacidad de procesar 36 muestras diarias automáticamente
2000Agro/Redacción
El titular del Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE), José Antonio Dávalos, inauguró en la isla Santa Cruz–Galápagos, un laboratorio de contaminantes agrícolas, ubicado en las instalaciones de la Agencia de Regulación y Control de la Bioseguridad y Cuarentena para Galápagos (ABG), el cual determinará la presencia o ausencia de contaminantes químicos de uso agrícola mediante la técnica de cromatografía de gases, en la producción primaria que se cultivan y comercializan en la provincia.
Este equipo que está valorado en aproximadamente 93 000 dólares, tiene la capacidad de procesar 36 muestras diarias automáticamente; y fue donado por esta cartera de Estado a través del Programa Nacional de Gestión de Químicos (PNGQ), con una inversión de 40 000 dólares por parte del gobierno ecuatoriano. Las muestras que se procesarán en este equipo permitirán verificar la calidad de las frutas y verduras que se consumen en las islas, precautelando, no solo la salud humana, sino también el ecosistema frágil de las islas encantadas.
En el acto, el ministro Dávalos señaló que para Galápagos es indispensable contar con este laboratorio y con su equipamiento. “Este laboratorio permitirá obtener resultados acertados para la toma de decisiones en cuanto al uso de plaguicidas en el territorio insular y así mejorar la calidad de vida de sus habitantes y a la par, conservar y proteger nuestro patrimonio natural.”
La Dra. Marilyn Cruz, directora ejecutiva de ABG, mencionó que este laboratorio es el inicio para fortalecer y brindar un mejor apoyo técnico a los productores, esto beneficiará a la economía, salud humana y conservación.
Por su parte Matilde Mordt, representante residente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), reafirmó el compromiso del PNUD en continuar los esfuerzos junto a la ABG y todos sus aliados para consolidar acciones integrales que permitan que las islas Galápagos mantengan su integridad ecosistémica y que su población se desarrolle de forma sostenible.
Las plagas agrícolas generan pérdidas económicas significativas, por lo que la utilización de plaguicidas químicos se ha convertido en un método de control ampliamente utilizado y asociado con los cultivos de importancia económica, sin embargo no son la solución a esta problemática.
Este proceso de análisis será implementado por la ABG en las cuatro islas pobladas, teniendo como beneficiarios a sus 30 000 habitantes y los visitantes. Otro de sus objetivos será entregar los diagnósticos personalizados por productor, muestreado a los dueños de las fincas o productores, de encontrarse novedades se coordinará las capacitaciones necesarias para solventarlas.
Fotografía: MAATE
