Cancún, Q. Roo (México).— Organizaciones de la sociedad civil enfocadas en la defensa y protección del medio ambiente e instituciones académicas, manifestaron su preocupación por la presentación a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) de una nueva Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) para instalar el “Parque Eólico Cozumel” en la costa oriental de la isla Cozumel.
Apenas el pasado mes de agosto dichas organizaciones e instituciones externaron su beneplácito por la decisión de la Semarnat de negar la Autorización de Impacto Ambiental al promovente del proyecto, México Power Group MPG Cozumel SAPI de CV, quien pretendía instalar 115 aerogeneradores a lo largo de la costa oriental de la isla Cozumel.
Para negar la autorización en aquella ocasión, la Semarnat tomó en cuenta los comentarios de las direcciones generales de Política Ambiental e Integración Regional y Sectorial y de Vida Silvestre de la propia secretaría, del Instituto Nacional de Ecología, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad, así como de la academia y la sociedad civil, las cuales coincidían en que el Parque Eólico Cozumel es improcedente debido al severo impacto ambiental que ocasionaría y por su incongruencia con los instrumentos normativos, de planeación ambiental y otros ordenamientos de la legislación mexicana.
Debe destacarse que anteriormente se modificó el Programa de Ordenamiento Ecológico Local (POEL) del municipio de Cozumel, presumiblemente buscando allanar el camino para la construcción del Parque Eólico Cozumel, no obstante lo cual dicho proyecto no fue aprobado por las numerosas causas indicadas en el resolutivo de la Semarnat.
Asimismo, la Semarnat señaló en su resolutivo que el proyecto habría implicado afectaciones a las poblaciones y hábitat de especies endémicas en peligro crítico de extinción, la destrucción de selva y manglar, además de riesgos para la población humana y la infraestructura urbana de Cozumel, en caso de que ocurrieran accidentes ocasionados por huracanes que golpean la zona.
Las organizaciones de la sociedad civil e instituciones académicas señalaron que, a pesar de ser un proyecto con menor número de aerogeneradores, el ecosistema y las afectaciones son las mismas. Por lo que la Semarnat debe aplicar los mismos criterios y negar el proyecto ingresado a Evaluación de Impacto Ambiental. De hecho, una de las observaciones de la Semarnat al proyecto anterior fue que los estudios realizados fueron muy cortos, a escala muy pequeña, y con métodos inapropiados, lo que hacía imposible identificar los posibles impactos. Desde el día que se emitió el resolutivo hasta la fecha han pasado menos de dos meses; lo que hace imposible la existencia de estudios adecuados, más completos y de largo plazo, y por lo tanto, el proyecto sigue careciendo de la información necesaria para ser evaluado.
Las organizaciones de la sociedad civil e instituciones académicas han indicado que “si bien como representantes del sector ambiental y académico estamos a favor de la promoción de las energías renovables, dentro de las cuales la eólica es una de las más factibles y limpias para México, se debe tener mucho cuidado sobre la ubicación de los aerogeneradores, de forma que no ocasionen afectaciones ambientales y sociales que superen los beneficios que aporten. Debido a su característica insular, con una alta riqueza biológica de relevancia mundial y de extrema fragilidad, la isla Cozumel no es un sitio adecuado para un parque eólico”, concluyeron.
Los tres niveles de gobierno y la sociedad de Cozumel han reconocido la fragilidad e importancia mundial de la impresionante riqueza biológica y cultural de la isla, por lo que recientemente han creado dos nuevas áreas naturales protegidas: la Reserva Estatal Selvas y Humedales de Cozumel (2011) y el Área de Protección de Flora y Fauna Isla de Cozumel (2012). El Parque Eólico Cozumel causaría severos daños ambientales y sociales que serían irreversibles y no mitigables que pondrían en peligro la herencia natural y cultural que los gobiernos y la sociedad de Cozumel con tanto empeño han buscado proteger para el disfrute de las generaciones actuales y futuras. Construir el Parque Eólico Cozumel sería un gran retroceso en la constitución de México y Cozumel como líderes en la promoción de un desarrollo verdaderamente sustentable.
Por: Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda)
