Un emprendedor mexicano consiguió un invento que evita el desperdicio de agua en la regadera ocasionado por la salida tardía del agua caliente
El asunto es importante, fundamental, estratégico, si consideramos que en México debe haber aproximadamente 23 millones de hogares que cuentan con una o más regaderas y en donde todos quienes toman un baño esperan a que el agua caliente salga para iniciar el proceso del “regaderazo”.
Estime usted un desperdicio mínimo de cinco litros y un máximo de 20 por cada baño. El derroche de agua es grandísimo.
El inventor es Hugo Iván Salazar, catedrático de la Universidad Autónoma de Querétaro, con posgrado en Gestión de Tecnología por la Universidad de Nuevo México, en Alburquerque.
Este catedrático lleva en el proceso de investigación poco más de tres años y para obtener el prototipo fueron necesarios año y medio de ensayo y error. Finalmente el prototipo, un octágono de ocho centímetros de diámetro y 25 centímetros de largo, ha demostrado que funciona y se procedió a investigar si es posible solicitar la patente internacional, con el resultado de que en 148 países no existe referencia que se acerque a esta tecnología.
El invento puede ahorrar entre dos y hasta seis minutos de agua fría corriendo y desperdiciándose en tanto llega el agua con la temperatura que desea quien está a punto de iniciar el baño.
El producto tiene por nombre Hydroloop
Con el riesgo de no dejar satisfecho a nadie, intenta el columnista explicar el proceso: el invento consiste en un aparato que se puede integrar a la pared del cuarto de baño o bien puede adaptarse de manera externa. Interconecta la llave de agua fría con la caliente.
Usted, antes de tomar el baño oprime un botón que lanza de manera inalámbrica una señal a la bomba del calentador. Esta orden permite que el agua que está fría y lista para ser enviada a la regadera se recicle hacia el calentador para elevar su temperatura. Cuando el agua caliente está lista para salir por la regadera el botón oprimido regresa a su condición inicial indicando al usuario que puede iniciar el baño. Lo recomendable es abrir primero el agua fría en lugar de abrir la llave del agua caliente.
Espero haber sido claro
El invento está por iniciar su producción en serie para lo cual hay empresarios nacionales dispuestos a invertir algo así como siete millones de pesos para realizar la producción masiva y hacer el lanzamiento al mercado a principios de 2015.
La versión “de lujo” tendrá un costo estimado en mil 500 pesos pero habrá otra versión “austera” para departamentos o casas de interés social que tendrá un costo de 400 pesos. La adaptación puede ser externa o se puede hacer sin que se vea, aunque en esta opción se requiere el trabajo de un experto.
Paralelamente el inventor ha documentado su producto como un modelo formalizado de emprendimiento innovador y considera que México está aún en pañales. Lo que quiere es fomentar la innovación y la producción de inventos en centros educativos superiores.
Fuente: El Financiero, imagen
