Especies

Protegen millones de tortugas en temporada de desove

Son vigiladas las principales playas de anidación de tortugas marinas

prote-tortugasMéxico, D.F.— Como parte de las tareas permanentes de inspección y vigilancia que se aplican durante la temporada de arribada de quelonios marinos que va de junio a diciembre, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ha protegido a más de dos millones y medio de tortugas marinas en las principales playas de anidación del país.

En el estado de Oaxaca se han protegido los nidos de alrededor de un millón 862 mil 876 tortugas, en su mayoría de la especie golfina (Lepidochelys olivacea), luego de registrarse 15 arribadas en las playas de Morro Ayuta y Escobilla.

Asimismo, son vigiladas las principales playas de anidación de tortugas marinas en los estados de Campeche, Guerrero, Tamaulipas, Quintana Roo, Sinaloa, Jalisco, Sonora, Baja California Sur, Michoacán, Chiapas, Oaxaca, Tamaulipas y Yucatán, entre otras.

También se efectúan visitas de inspección con el fin de verificar los términos y condicionantes de las autorizaciones de aprovechamiento no extractivo en campamentos tortugueros, actividades turísticas y colecta científica.

Cabe destacar que todos los quelonios marinos que se reproducen en México están protegidos por la NOM-059-SEMARNAT-2010, donde figuran en la categoría “P”, es decir, en peligro de extinción.

Por ende, está prohibida su captura, así como su aprovechamiento y la extracción de sus huevos, incluso para consumo humano y/o de supervivencia.

La tortuga golfina es la de mayor abundancia en el territorio nacional y arriba principalmente a las playas de los estados de Guerrero, Michoacán y Oaxaca.

El artículo 420 del Código Penal Federal señala que se impondrá pena de uno a nueve años de prisión y multa que va de los 300 a los tres mil días de salario mínimo vigente, a quien ilícitamente recolecte o almacene los productos (como son los huevos) y subproductos de tortugas marinas.

Asimismo, destaca que se aplicará una pena adicional de tres años más de prisión y hasta mil días de multa adicionales a quienes realicen estas actividades en un área natural protegida.

Fuente: Teorema Ambiental, imagen

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