Su cara está poblada por un conjunto de finas y densas plumas receptoras de cualquier vibración sonora
Ciudad de México.— El Museo de Historia Natural invita al público a que conozca en el vestíbulo de este recinto a la lechuza de campanario (Tyto alba), llamada así porque frecuentemente hace sus nidos en los campanarios de las iglesias.
Esta especie es cazadora y solitaria. Su cara está poblada por un conjunto de finas y densas plumas receptoras de cualquier vibración sonora, las cuales orientan el sonido que perciben hacia sus oídos.
Durante el día, la lechuza de campanario se oculta en algún refugio cercano a su zona de cría y por la noche realiza gran parte de sus actividades como cazar, aparearse y defender su territorio. Estos ejemplares pueden capturar a sus presas en plena oscuridad, con solo escuchar sus pasos.
Su abanico de plumas le permite volar en silencio y con ligereza; haciendo su paso casi inaudible para roedores, musarañas, liebres y conejos, aunque también llegan a capturar algunas aves, reptiles y anfibios. Habitan en todos los continentes, en zonas rurales y urbanas, excepto en la Antártida.
Esta lechuza es considerada como una especie de preocupación menor en el estatus de extinción.
Ven a conocerla en el Museo de Historia Natural de la Ciudad de México el cual abre sus puertas de 10:00 a 17:00 horas de martes a domingo. La entrada general tiene un costo de $25.00; para maestros y estudiantes con credencial vigente $11.00; la entrada es libre para adultos mayores, personas con discapacidad y menores de tres años.
Para mayor información comunicarse al teléfono 5515-6304, Exts. 112 y 113, o consultar la página web www.sedema.cdmx.gob.mx/museodehistorianatural
Fuente: Teorema Ambiental
