Estos ecosistemas albergan la mayor riqueza de mamíferos, aves y anfibios, además de ser fuente de maderas preciosas, leña y diversidad de plantas y animales
México D.F.— En el marco del Día Internacional de la Preservación de los Bosques Tropicales, Jorge Rescala Pérez, director general de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), señaló que México posee 31 millones de hectáreas de este tipo de bosques, por lo que es importante fomentar acciones sustentables para el manejo adecuado de estas zonas.
Estos ecosistemas albergan la mayor riqueza de mamíferos, aves y anfibios, además de ser fuente de maderas preciosas, leña y diversidad de plantas y animales para la subsistencia de comunidades rurales e indígenas.
Según datos de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), en México existen dos tipos de bosques tropicales: la selva alta húmeda y la selva mediana o baja, también conocida como selva seca o espinosa.
Las selvas húmedas o altas son las comunidades vegetales más exuberantes del país, están formadas por árboles de hasta 30 metros o más de alto. Su distribución recorre la vertiente del Atlántico, desde el sur de San Luis Potosí a lo largo de Veracruz hasta Tabasco y en el sur de la península de Yucatán, explicó Rescala Pérez.
Además se encuentra en una angosta franja de la vertiente pacífica de la Sierra Madre de Chiapas, así como áreas de menor tamaño en las faldas bajas de la Sierra Madre del Sur de Oaxaca y Guerrero, por lo general en terrenos por debajo de los mil 200 metros sobre el nivel del mar.
Las selvas secas se desarrollan en climas del trópico húmedo y subhúmedo. Su nombre se debe a que durante el estiaje más del 50 por ciento de sus especies pierden las hojas. Se encuentran a lo largo de la costa del Pacífico (hasta el sur de Sonora en su límite norte), a lo largo de las faldas bajas y los cañones de la vertiente del Pacífico de la Sierra Madre Occidental, en las planicies, llanuras y otras zonas bajas e inundables de la península de Yucatán y el sur de Veracruz y Tabasco.
En las selvas secas viven alrededor de seis mil especies de plantas. Casi el 40 por ciento de sus especies son endémicas, es decir, solamente se encuentran en estos ecosistemas, y están adaptadas a la sequía. Entre las especies que la habitan hay una gran variedad de copales.
Por otro lado, las selvas espinosas se desarrollan en condiciones más secas que las correspondientes a las selvas secas, pero a su vez más húmedas que las propias de los matorrales xerófilos y, a diferencia de estas últimas, que se restringen a cerros o laderas con suelos someros, el bosque espinoso es frecuente en suelos profundos, puntualizó el director de la Conafor.
Fuente: Teorema Ambiental
