México cuenta con alrededor de 19 millones de hectáreas de áreas naturales protegidas, importantes espacios terrestres o marinos con ecosistemas poco alterados por las actividades humanas y amparados por la ley para evitar su destrucción.
Estos espacios comenzaron a crearse al final del siglo XIX y principios del siglo XX por razones estéticas, recreativas o para la protección de manantiales.
El Desierto de los Leones, en la capital del país, y el Parque Nacional El Chico, en Hidalgo, se pelean el título de primera área protegida.
El más reciente caso se dio esta semana en Querétaro, donde el gobierno estatal declaró Área Natural Protegida a 280 hectáreas de la Peña de Bernal, una de las dos delegaciones que integran el municipio de Ezequiel Montes.
La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas registra 154 sitios divididos en siete categorías: 35 reservas de la biosfera, 28 áreas de protección de flora y fauna, 67 parques nacionales, dos áreas de protección de recursos naturales, cuatro monumentos naturales, 17 santuarios y uno más sin asignación.
Las reservas de la biosfera ocupan 10’956,505 hectáreas, las áreas de protección de flora y fauna 6’073,127, los parques nacionales 1’456,988, área sin asignación 186,734.
Fuente: Milenio Diario
