Se utilizan 220-350 litros de agua por día en cada casa, considerando que hay personas que no cuentan con agua en sus hogares y otras que gastan hasta 800 litros del vital líquido
Teorema Ambiental/Redacción
La Universidad del Medio Ambiente (UMA), de la mano de tres panelistas expertos, articularon una conversación sobre la sostenibilidad hídrica y el daño, casi imperceptible, que se está haciendo en la Ciudad de México al agua, en el panel “Habitantes, ciudad y agua: El caso de la CDMX”.
“El agua es vista como enemiga. Queremos construir aquí, ¿cómo que el agua no me permite hacerlo?”, comentó Claudia Campero, colaboradora de Food & Water Watch, en defensa del agua y contra el fracking. La situación que determina la Ciudad de México es que construimos un sistema de aguas del cual es difícil salir. El Valle de México fue drenado para construir sobre áreas secas, esto hizo que se tuviera que comprometer el seguir drenando para continuar creciendo la ciudad y para evitar inundaciones en la misma.
Enrique Lomnitz, cofundador de Isla Urbana, un proyecto de captación de lluvia como solución al abasto de agua en la Ciudad de México, comentó que es necesario transferir a la población el control y el manejo del agua. “La gente no tiene claridad de dónde viene y adónde va el agua. Estamos recibiendo agua de la red que no sabemos si es de buena calidad o no. No tenemos acceso a los registros de calidad de agua, ni estamos seguros de que esos registros existan.”
Fernando Córdova, investigador de la ecología en cuerpos de agua e impacto socioambiental en megaproyectos, por su parte, agregó que el agua ya no es suficiente, ya que la ciudad creció mucho más de lo planeado. “No tenemos límites de crecimiento de la ciudad, estamos subsidiando la resiliencia del agua. Como podemos seguir trayendo agua de otros lados, creemos que ya tenemos agua otra vez.”
Córdova habló de cómo el corte de agua nos hizo darnos cuenta de que estamos dependiendo de un solo tubo. “Si Lerma-Cutzamala falla, tendremos una crisis. Estamos viviendo en ella, pero no nos damos cuenta porque continuamos subsidiando la resiliencia del agua.” ¿Quién tiene más prioridad sobre el uso del agua? La Ciudad de México está trayendo agua de otras comunidades. “Nos hemos beneficiado de los recursos de los que sí cuidan su agua”, agregó Campero.
“Es difícil saber cuánta agua nos queda porque está en el subsuelo y si seguimos sacando, la ciudad se va a seguir hundiendo. La misma lluvia de siempre, nos afectará cada vez más porque estamos más abajo.”
Campero comentó que es necesario democratizar más el manejo del agua y comenzar con soluciones en las viviendas, en los barrios. “Es difícil imaginar una manera distinta de hacer las cosas, imaginar hablar con los vecinos, ponerse de acuerdo, hacer las cosas uno mismo. Si no lo ensayamos, se nos saldrá de las manos.”
