La Comisión Europea instó a los países que se oponen a cumplir con la tasa europea que grava las emisiones de CO2 de los aviones a presentar alternativas “concretas y constructivas”, en lugar de plantear represalias
Bruselas.— La Comisión Europea (CE) instó hoy a los países que se oponen a cumplir con la tasa europea que grava las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los aviones a presentar alternativas “concretas y constructivas”, en lugar de plantear represalias.
Estos días se encuentran reunidos en Moscú (Rusia) representantes de varios países contrarios a acatar el gravamen europeo (conocido como ETS), que obliga desde el pasado 1 de enero a todos los vuelos que operen en la Unión Europea a pagar por cada tonelada de CO2 que liberan a la atmósfera.
El viceministro de Transporte ruso, Valeri Okúlov, explicó hoy que Moscú estudia en respuesta gravar los vuelos de compañías europeas sobre Siberia y que prepara una ley para prohibir a sus compañías aéreas pagar la tasa europea.
De este modo seguiría los pasos de China, que tomó esta decisión a principios de mes.
El portavoz comunitario, Isaac Valero, señaló en una rueda de prensa que de la reunión en la capital rusa no ha salido “nada nuevo, ni concreto” y pidió a los países que se oponen a la tasa europea que trabajen por alcanzar un acuerdo global sobre las emisiones de CO2 de la aviación.
Bruselas ha mostrado reiteradamente su disposición a no aplicar la tasa a las aerolíneas de aquellos países que adopten medidas equivalentes.
Valero recordó también que las aerolíneas que incumplan reiteradamente la normativa europea se enfrentan a posibles sanciones (diez mil euros por cada tonelada de CO2 emitida sin permiso) e incluso a la prohibición de operar en territorio comunitario, de mantenerse en su postura.
“Esperamos que este último recurso no tenga que ser nunca aplicado”, advirtió Valero.
Países como Estados Unidos, Canadá, China, Brasil o México se oponen a esta medida al considerar que perjudica a sus vuelos de largo recorrido, por lo que reclaman que sus compañías estén exentas de pagar o, al menos, que sólo paguen por los gases liberados mientras sobrevuelan la UE.
Estos países consideran además que la tasa es ilegal, punto rechazado por el Tribunal de Justicia de la UE, que desestimó en diciembre pasado la demanda presentada por varias aerolíneas norteamericanas contra la tasa y sentenció que ésta era compatible con el derecho internacional.
La tasa, adoptada en 2008, supone la inclusión de la aviación en el sistema comunitario de comercio de derechos de emisión (ETS, por sus siglas en inglés) y se aplica desde el pasado 1 de enero a todos los aviones que aterricen o despeguen en la UE, sean o no comunitarios.
Fuente: La Información