El Senado de la República solicitará al Ejecutivo federal que otorgue una pronta respuesta a los productores nacionales de cacahuate que se encuentran impedidos para comercializar su cosecha primavera-verano 2001 debido al considerable y abrupto incremento en las importaciones de cacahuate procedente de China.
De 1998 a 2001 las importaciones de cacahuate con cáscara provenientes de la República Popular de China pasaron de apenas 79 toneladas a casi 15,000 toneladas en 2001, con un valor comercial en este último año de casi 9 millones de dólares. Mientras que de 1999 a 2001, las importaciones de cacahuate de China crecieron explosivamente en más de 14 veces.
Por medio de un punto de acuerdo, presentado por los senadores priistas Lauro Díaz Castro y Héctor Vicario Castrejón, se solicitará al Ejecutivo elaborar, ejecutar y prever los recursos e instrumentos necesarios, para un programa de acciones de corte estructural, que permita dar certidumbre de mediano y largo plazos a las regiones productoras de cacahuate del país.
También se requerirá a los titulares de las secretarías de Economía y de Hacienda y Crédito Público, Luis Ernesto Derbez y Francisco Gil, que tomen medidas para regular y programar los flujos de importación de cacahuate, de tal manera que se minimicen sus efectos negativos en la comercialización de las cosechas nacionales. De igual manera, se pedirá mantengan una vigilancia permanente que garantice el cumplimiento veraz y estricto de las disposiciones y requisitos aduanales en los procesos de importación de cacahuate al país.
Los legisladores argumentaron que 86 por ciento de la superficie sembrada en el país (alrededor de 90,000 hectáreas cultivadas en 26 estados), se realiza en condiciones de temporal, en terrenos limo-arenosos, poco aptos para otras opciones de cultivos cíclicos, y representan prácticamente la única opción de actividad y de ingreso para numerosas familias campesinas de bajos y muy bajos recursos.
Destacaron que, pese a que la siembra y producción nacional se ha mantenido estable, de 1998 a la fecha muchos estados productores, especialmente los que se encuentran más alejados de los grandes centros de consumo, están enfrentando crecientes dificultades para su comercialización, pues el mercado nacional presenta sobreoferta por efecto de las importaciones.
Los efectos adversos al sector agropecuario nacional por la incongruencia entre las políticas comerciales y las políticas agropecuarias, no sólo se han restringido a los llamados productos sensibles como los granos y oleaginosas mayores, sino que han afectado ya a prácticamente la totalidad de los productos del campo.
El cacahuate en México
Se cultiva en 26 estados del país, en una superficie de alrededor de 90,000 hectáreas.
Produce anualmente 130,000 toneladas. Destacan por su importancia los estados de Oaxaca, Puebla, Chihuahua, Sinaloa, Chiapas y Guerrero, que contribuyen con más del 80 por ciento de la producción nacional.
Dificultades de comercialización
Pese a que la siembra y producción nacional se ha mantenido estable, de 1998 a la fecha muchos estados productores, especialmente los que se encuentran más alejados de los grandes centros de consumo, enfrentan crecientes dificultades para su comercialización.
El precario equilibrio de la balanza producción-consumo de cacahuate fue trastocado por las crecientes importaciones, derrumbando no sólo el precio en el mercado nacional, sino dificultando severamente, y en muchos casos impidiendo, la colocación comercial de las cosechas.
En el mejor de los casos, muchos productores se han visto forzados a malbaratar el producto; otros sencillamente se han quedado con sus cosechas almacenadas, sin ningún ingreso para subsistir o pagar sus compromisos.
