- La calculadora CII se agrega a los informes regulatorios MRV de la Unión Europea y DCS de la OMI existentes para garantizar el cumplimiento y un envío más ecológico
Teorema ambiental/Redacción
En respuesta a la implementación por parte de la OMI del Indicador de intensidad de carbono (CII), RINA ha lanzado un Sistema de notificación de embarcaciones (VRS) destinado a impulsar los esfuerzos de descarbonización por medio de informes simples.
La notificación de buques puede llevar mucho tiempo, y la nueva regulación CII presionará aún más a los propietarios y administradores de buques. La nueva herramienta de informes flexibles de RINA recopilará datos y permitirá la creación de paneles para manejar no solo los requisitos de CII, sino todos los informes.
El informe CII proporciona una imagen precisa y completa de las emisiones de carbono y la eficiencia energética de un barco en función de los datos de entrada, como el tiempo en el mar, el tiempo en el puerto, la velocidad promedio de navegación, el consumo de combustible por tipo de combustible y la distancia navegada.
Michela Schenone, gerente de Soluciones Digitales Marinas en RINA, dijo: “Con el Sistema de Informes de Embarcaciones, los propietarios y administradores de embarcaciones pueden evitar posibles reembolsos por calificaciones CII negativas. Pueden rastrear fácilmente el consumo de combustible y las emisiones y, a medida que la tripulación ingresa nuevos datos, el sistema de informes de embarcaciones realiza automáticamente controles de calidad en tiempo real para evitar errores de entrada.”
El nuevo Vessel Reporting System es una solución independiente que requiere una configuración mínima del sistema. Para las organizaciones que ya utilizan SERTICA, la herramienta se puede agregar como un módulo. La calculadora CII también se puede combinar con el simulador CII de RINA. Los propietarios y administradores de barcos pueden medir el CII de los viajes reales y estimar el CII de los posibles mediante el análisis de datos, incluidas las rutas recomendadas y la velocidad para alcanzar una clasificación CII específica, y en última instancia tomar las decisiones operativas correctas para minimizar las emisiones.
Fotografía: RINA
