- Se ha monitoreado la presencia del águila real en Jalisco y se registró su reproducción, como señal de buena salud de los ecosistemas
Teorema Ambiental/Redacción
El águila real es un ave emblemática de nuestro país, en la tradición Wixárika se consideran animales sagrados, vigilantes de lo que sucede sobre la tierra y debajo de ella. Para impulsar su conservación, el Gobierno de Jalisco, por medio de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet), en colaboración con otras dependencias y gobiernos, ha realizado proyectos de monitoreo y protección del hábitat de esta especie.
El 13 de febrero de cada año se conmemora el Día Nacional del Águila Real, una especie catalogada como amenazada por la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010 y que ha hecho de Jalisco un hogar, como se ha documentado en los últimos años.
En la región norte de Jalisco, con la gestión de la Junta Intermunicipal de Medio Ambiente para la Gestión Integral de la Región Norte de Jalisco (JINOR) y el financiamiento del Fideicomiso del Fondo Estatal de Protección al Ambiente del Estado de Jalisco (Fepaj), se integraron cuatro brigadas de monitoreo especializadas. Mediante esta labor, durante la presente administración se identificaron y monitorearon siete territorios de anidación del águila real, además en los municipios que integran la región norte se han registrado y observado 18 ejemplares, así como documentado tres casos de éxito reproductivo: polluelos de águila real que abandonan el nido de forma exitosa y en buen estado.
Asimismo, la Junta Intermunicipal de Medio Ambiente Altos Norte (JIAN) en colaboración con la asociación civil Faunística, ha trabajado en el monitoreo del águila real. Se confirmó la anidación de una pareja, se documentó el proceso de crecimiento de un polluelo que salió del nido a quien le nombraron Matías “El Alteño”. Este fue el primer registro de éxito reproductivo en la región. Además con información de telemetría satelital, se han identificado cinco sitios en condiciones para la anidación de la especie.
La Semadet ejecutó el proyecto “Brigada o Comité de Vigilancia Ambiental Participativa”, subsidiada por el Programa de Empleo Temporal de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social de Jalisco, en territorios de los municipios de Mezquitic y Huejucar donde se identificó la presencia del águila real, cabe mencionar que dos sitios de anidación se comparten con el estado de Zacatecas.
En el II Foro para la Conservación del Águila Real en México en Monte Escobedo, Zacatecas, se firmó un convenio de coordinación entre la Comisión Nacional de Áreas Protegidas (Conanp) y los gobiernos de los estados de Jalisco, Zacatecas y Sonora. En el Panel Regional sobre el Águila Real, organizado por la Secretaría de Sustentabilidad, Medio Ambiente y Agua de Aguascalientes, se llevó a cabo la Firma de Manifiesto para la Protección del Águila Real en el Territorio del Corredor Biocultural del Centro y Occidente de México (Cobiocom) que tienen águila real en sus territorios: Zacatecas, Guanajuato, Aguascalientes, Jalisco y San Luis Potosí.
El águila real es considerada una especie sombrilla ya que su presencia indica que existen los suficientes recursos en los ecosistemas para su desarrollo y reproducción, como presas silvestres, sitios de refugio y anidación. Dentro de las principales amenazas identificadas para esta especie encontramos el envenenamiento bioacumulativo por ingerir presas que han sido envenenadas, los cables de alta tensión, la pérdida del hábitat ya que disminuye la disponibilidad de animales para cazar y la presencia de grupos de cacería ilegal.
Fotografía: Semadet