En principio serán cinco cuencas hidráulicas de gran importancia para el país; el proyecto se irá ampliando poco a poco.
México, D.F.— Con el objetivo de impulsar acciones concretas para la conservación de los humedales y el régimen hidrológico en el país, la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), firmaron un acuerdo de colaboración.
Las primeras acciones corresponderán a los ríos San Pedro Mezquital (Durango, Nayarit y Zacatecas), Copalita-Zimatán-Coyula (Oaxaca), Chamela (Jalisco), Papaloapan (Veracruz) y Sierra Gorda (Querétaro, San Luis Potosí y Guanajuato).
El convenio de las tres instituciones abarca el desarrollo e integración de índices de conectividad eco-hidrológica y de vulnerabilidad a los impactos del cambio climático, que fortalezcan el sistema de las reservas potenciales de agua y lo vinculen con otros instrumentos de conservación; la vinculación de procedimientos administrativos en pro de las reservas de agua y las áreas naturales protegidas; los estudios técnicos justificativos de las reservas de agua en las cinco zonas piloto; diseño de un sistema de monitoreo y evaluación del desempeño de las reservas de agua y su impacto en la red de áreas naturales protegidas; así como asegurar el financiamiento para las reservas de agua de fuentes públicas y privadas.
Durante la firma del convenio, David Korenfeld, director general de la Conagua, enfatizó que “las reservas de agua para el ambiente y el caudal ecológico son asuntos pendientes en el país” y que “es indispensable considerar a los ecosistemas naturales no sólo como otro usuario del agua sino como los generadores de este líquido vital”.
El convenio define las actividades, indicadores y responsabilidades de cada institución durante el primer año y dentro del marco del Programa Nacional de Reservas de Agua (PNRA) del gobierno federal. La instrumentación de este programa dio comienzo con una inversión inicial de 850 mil dólares otorgados por el Banco Interamericano de Desarrollo al gobierno mexicano, a través de la Conagua, y que están siendo ejercidos bajo la coordinación de WWF.
En 2012, durante la 11ª Conferencia de las Partes de la Convención Ramsar sobre los Humedales de Importancia Internacional, la Conagua y WWF propusieron una iniciativa para proteger los volúmenes de agua que requieren los humedales (a partir de las experiencias del PNRA), la cual fue ampliamente apoyada por los países miembros de la Convención.
Luis Fueyo MacDonald, comisionado de la Conanp, señaló que “el manejo sustentable de las fuentes de agua es el seguro que la sociedad y la naturaleza requieren ante los impactos del cambio climático”.
A mediano plazo, el PNRA tiene como objetivo la protección del régimen hidrológico en 55 sitios Ramsar, 97 áreas naturales protegidas y más de 78 mil kilómetros cuadrados de cuencas hidrológicas en México.
“El programa de reservas de agua enfatiza el compromiso de México de mantener un equilibrio entre el uso del agua por los sectores productivos, como la agricultura, al mismo tiempo que se conservan las fuentes de agua y se protegen los ecosistemas. Es una iniciativa que coloca a México a la vanguardia del manejo responsable del agua. Las instituciones firmantes nos hemos comprometido a entregar resultados concretos en el 2013 y a cooperar para buscar el financiamiento necesario de fuentes públicas, privadas y de organismos multilaterales que permitan la instrumentación de esta ambiciosa iniciativa”, señaló Omar Vidal, director general de WWF-México.
Durante el primer año de instrumentación, el PNRA presentará las propuestas de decreto de reservas de agua para el ambiente en las cinco zonas piloto —San Pedro Mezquital, Copalita-Zimatán-Coyula, Chamela, Papaloapan y Sierra Gorda— con base en los estudios técnicos justificativos, y fortalecerá las capacidades técnicas del personal de las agencias involucradas y actores locales de cada cuenca.
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