Debido al tardío diagnóstico, más de la mitad de pacientes sufren daño irreversible
Teorema Ambiental/Redacción
De acuerdo con el estudio realizado por el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), alrededor del 60 por ciento de las personas que acude a consulta por un problema de glaucoma, ya tiene un deterioro visual grave debido a un diagnóstico tardío, lo que genera un pronóstico muy limitado.
Según Francisca Domínguez Dueñas, académica de la Facultad de Medicina de la UNAM y subdirectora de Oftalmología del INR, el padecimiento se puede detectar mediante estudios llamados “examen del fondo del ojo” y el “estudio de tomografía óptica coherente”, no obstante, aunque se realicen de forma temprana, detectan el glaucoma cuando hay un daño y la pérdida de capas de fibra nerviosa, señala la especialista.
En respuesta, especialistas de la UNAM y del Instituto Nacional de Medicina Genómica (Inmegen) desarrollan una prueba diagnóstica que prevenga el glaucoma antes de que se presente algún daño. Esta consiste en la detección de biomarcadores proteicos, característicos de la enfermedad, mediante una muestra de sangre.
“Hay muchos biomarcadores, como los genéticos o biomoleculares, pero en este caso hemos hecho énfasis en los proteómicos, que definimos como el conjunto de proteínas presentes en una muestra”, señaló Juan Pablo Reyes, investigador del Inmegen. Estos biomarcadores serán la base de la prueba clínica de diagnóstico temprano que diseñan los especialistas, la cual afinan para mejorar su sensibilidad y especificidad.
Dueñas Domínguez agregó que hasta ahora han identificado alrededor de 50 posibles candidatos proteicos que funcionarían como biomarcadores. “No en una sola molécula, sino en un conjunto de proteínas.” En la presentación en la UNAM, dijo que aún falta camino por recorrer para obtener una prueba diagnóstica, pero este sería el primer paso.