Existe el riesgo de que los metales lleguen a los acuíferos
Sonora.— La coordinadora de la campaña de Tóxicos de Greenpeace México, Sinaí Guevara, aseveró que podrían pasar décadas para la rehabilitación de los ríos Bacanuchi y Sonora ante el derrame ocurrido el mes pasado de metales pesados, “ya que se van al fondo, empiezan a hundirse, por lo que existe el riesgo de que los metales lleguen a los acuíferos y contaminen los lodos y el suelo”.
Asimismo, señaló que los metales pesados que se quedaron en la zona, además de ácido sulfúrico y sulfato de cobre, hay cromo, mercurio, arsénico y aluminio, y algunas de estas sustancias llegan a provocar enfermedades muy graves, que van desde irritación en la piel, problemas en las vías respiratorias, insuficiencia renal, cáncer y hasta la muerte.
Definitivamente lo que ocurrió en los ríos Bacanuchi y Sonora fue un error y una negligencia de parte de Grupo México, pero también de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y de todos los encargados de inspeccionar que la minera opere en condiciones adecuadas, acusó Sinaí Guevara.
