El equipo tiene la intención de descubrir e informar en su viaje de las innovaciones resultantes del sistema D, ecológicas y no contaminantes
Francia.— El pasado 23 de febrero, el ingeniero francés Corentin de Chatelperron y su equipo zarparon desde el puerto de Concarneau en Finisterre, para realizar una vuelta al mundo de 36 meses a bordo del catamarán Nomade des mers. Corentin de Chatelperron ya se había dado a conocer en 2009 y en 2013 por viajes entre Bangladesh, Francia y en el Golfo de Bengala a bordo de una embarcación exclusivamente construida a partir de materiales de recuperación.
A bordo de su buque, la tripulación va al descubrimiento de las low-techs —en oposición a las high-techs que son energívoras, es decir grandes consumidoras de energía— a través del mundo. El equipo tiene la intención de descubrir e informar en su viaje de las innovaciones resultantes del sistema D, ecológicas y no contaminantes.
Estas tecnologías no poseen ningún vector de difusión pues son inventadas localmente para responder a necesidades esenciales. “Hay una verdadera revolución por hacer tan solo en la difusión de estos conocimientos”, precisa el aventurero.
El mismo Nomade des mers es ecológico: incluye —entre otros— una hornilla de madera económica, un aeromotor hecho de material de recuperación, cuatro gallinas y fardos de heno con el fin de producir gusanos de harina que les servirán como aporte de proteínas.
A bordo del catamarán, la tripulación efectuará 15 escalas. Se detendrán, en particular, en Marruecos para descubrir la desalinización; en Senegal por el carbón verde o incluso en Malasia para la purificación por micro-algas. La expedición será objeto de una serie de 15 episodios de 26 minutos difundida en el canal cultural franco-alemán Arte, en 2017.
Fuente: Teorema Ambiental / Breves de Francia
