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Importancia del cacao y chocolate en su día nacional

Cada 2 de septiembre se festeja el Día Nacional del Cacao y Chocolate, y en México esta conmemoración se celebra por segunda ocasión

Ciudad de México, 8 de septiembre de 2021.— Cada 2 de septiembre se festeja el Día Nacional del Cacao y Chocolate, y en México esta conmemoración se celebra por segunda ocasión. Recordemos que la planta del cacao se desarrolla en zonas tropicales húmedas y los mayas fueron quienes descubrieron sus propiedades, difundiendo sus usos, así como los beneficios de esta planta.

En México, de acuerdo con cifras de 2019 del Sistema de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), México es el precursor del cacao en el mundo con una producción aproximada de 29 mil toneladas al año, con más de 40 mil productores; entre los estados que producen esta semilla sobresalen Chiapas, Guerrero, Tabasco, Yucatán, esta última entidad con una importante aportación a chocolateras de Hungría, Alemania y Rusia.

Para conmemorar este día se reunieron en la alcaldía Miguel Hidalgo el secretario de Turismo de la Ciudad de México, Carlos Mackinlay; el presidente de Difusión de Asuntos Internacionales de Hypathia, AC, Oliver Romo Miranda; la representante diplomática de la Embajada de Indonesia en México, Eva Triana; el embajador de Costa de Marfil, Robert D’jerou Ly, y el alcalde Abraham Borden Camacho.

Robert D’jerou Ly dijo que México cuenta con una historia relevante de hace muchos siglos con el descubrimiento del cacao; sin embargo, agregó que en la actualidad Costa de Marfil es el primer productor de cacao en el mundo con 40 por ciento de la producción y dos millones de toneladas.

“La cadena de valores del cacao genera enormes ganancias financieras de alrededor 100 mil millones de dólares anuales, sin embargo, nos damos cuenta de que solo beneficia a las empresas chocolateras, mientras que los campesinos que consagran sus días y su vida entera al cultivo del cacao no reciben nada a cambio. En efecto, solo entre el 4 y el 6 por ciento corresponden a cada país y aún menos corresponden a los campesinos.”

Por ello resaltó que actualmente las empresas chocolateras se enriquecen, mas los campesinos se empobrecen, por lo que es de suma importancia reducir este margen mediante acciones como implementar los ingresos de los campesinos, lo que les permitirá escolarizar a sus hijos, a fin de evitar que trabajen en el campo y romper así el ciclo; reconsiderar los precios de compra del cacao y que las multinacionales chocolateras acepten implementar el precio de compra del cacao con el fin de mejorar las condiciones de vida de los campesinos mediante la construcción de escuelas, viviendas dignas, hospitales y centros médicos en zonas de producción de cacao, acceso al agua potable y a la luz, mejorar las condiciones de trabajo con la mecanización del cultivo y de las cosechas a fin de exponer menos a los campesinos a las enfermedades.

Por estas razones, dijo que “Costa de Marfil se comprometió en la lucha para una justa regeneración del precio de compra del cacao además de la transformación local del cacao en productos como el chocolate y los dulces; pero esta lucha no debe ser solo de un país, sino que debe ser una acción colectiva concertada en todos los actores de la cadena de producción del cacao. Es indispensable que las multinacionales tomen conciencia de su responsabilidad social hacia los países y los campesinos del sector del cacao. Por lo tanto, es de manera conjunta entre productores, las multinacionales y todos los actores de la cadena de producción del cacao que se superará este gran desafío”.

Para concluir esta celebración se montó una exhibición de trajes típicos, así como una degustación de chiles en nogada, además de chocolate; también hubo una muestra de productores teotihuacanos donde se degustó el “Espíritu de Quetzalcóatl”, bebida de chocolate y aguardiente.

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