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Basura y cruda ambiental, la otra cara de las fiestas navideñas

En la temporada decembrina aumenta hasta 30 por ciento la producción de residuos; la pandemia incrementó hasta 17 por ciento la basura doméstica

Ciudad de México, 10 de enero de 2022.— Terminaron las posadas, fiestas navideñas, de fin de año y de reyes magos, que dejaron buenos deseos y unión familiar, sin embargo, también causaron importantes estragos ambientales; de acuerdo con la organización Ecologistas en Acción, durante el mes de diciembre el número de residuos diarios aumenta 30 por ciento, cifra cercana a la que calculan las autoridades de la Ciudad de México de 25 por ciento de aumento de basura como resultado de la ruptura de piñatas, uso de platos y vasos desechables, así como envolturas de regalos.

De acuerdo con Ignacio Parada, CEO de Bioelements y especialista en medio ambiente, esta situación es preocupante porque las celebraciones duran solo una breve temporada, sin embargo, los residuos, sobre todo los plásticos, pueden permanecer en el ambiente hasta 400 años, lo que considera “es un problema mayúsculo” pues durante su “estancia” liberan elementos químicos que afectan negativamente al medio ambiente e incrementan la huella de carbono.

Además, durante ese periodo son tóxicos para el medio ambiente en el cual se encuentran en contacto; la mayor parte de estos residuos no se reutiliza ni se recicla y acaba en los basureros o en el mar. Ante este panorama, señala que algunos gigantes del comercio y del ecommerce han optado por cambiar los materiales con los que se fabrican sus empaques por alternativas que conservan las mismas funcionalidades y al mismo tiempo, logran cuidar el medio ambiente.

Por otro lado, explica que aunque se considera que el cartón y los papeles utilizados de manera común en esta temporada son amigables con el medio ambiente, su producción es una de las actividades industriales con mayor impacto negativo pues su proceso de fabricación, distribución y consumo implica la sobreexplotación de recursos naturales como el agua y los árboles. Asegura que por cada kilo de papel producido se emiten alrededor de 3.3 kilogramos de dióxido de carbono equivalente (CO2e).

El especialista advierte que sin importar si se trata de festividades o días regulares, los consumidores pueden considerar empaques biodegradables que son resultado del desarrollo tecnológico y de investigación y que son capaces de biodegradarse en un periodo de entre seis y 20 meses, incluso algunos como los productos Bioelements, pueden ser consumidos por los microorganismos en cualquier ambiente, lo que contribuye a que el ciclo vital siga su curso y todo ello, sin perder características de los empaques como su permeabilidad, resistencia y flexibilidad.

Señala que “habrá un día después de las fiestas”, por ello, es de suma importancia considerar opciones de productos y empaques de los mismos que cumplan con certificaciones y aval de instituciones como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), que garanticen que realmente se integrarán al medio ambiente en un corto periodo de tiempo y que no dañarán el ecosistema en el que se alojen.

Por otro lado, Nancy Jiménez Martínez, del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias (CRIM) de la UNAM, explica que el aumento de residuos se suma a la situación que impuso la pandemia por covid-19 que ocasionó un aumento en la basura doméstica de 3.5 a 17 por ciento.

“Enfrentamos una crisis, pero no es el único reto para la humanidad, toda vez que está también el cambio climático o plástico en los océanos, entonces tenemos que ser mesurados en la generación de residuos”, señaló la especialista universitaria.

Ignacio Parada refiere que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), ha alertado de las grandes cantidades de plásticos que contaminan las tierras usadas para el cultivo que son incluso mayores que las que contaminan los océanos, lo que pone en riesgo la seguridad alimentaria y el medio ambiente.

“No solo se trata de las consecuencias para el medio ambiente, también de los efectos que tienen los residuos en la vida de los seres humanos, por ejemplo, en la Ciudad de México de las cerca de 12 mil toneladas de residuos que se producen al día en la ciudad, ocho mil 600 se van directas a rellenos sanitarios y solo mil 900 toneladas se aprovechan en reciclaje y mil 400 en composta, lo que deja claro que el manejo de los residuos aún no es suficiente para evitar que la basura permanezca en el medio ambiente y ante ello, una opción es el uso de biodegradables”, señaló el directivo.

Fotografía: Cortesía Spread

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