Marcelo Ebrard destacó que cualquier acción de gobierno debe ir acompañada de un cambio en el patrón de comportamiento de sus ciudadanos
México, DF.— La ciudad de México contribuyó notablemente a contrarrestar el cambio climático del planeta a diferencia de otras ciudades, pues la puesta en marcha en 2008 del Programa de Acción Climática por el gobierno capitalino, permitió reducir 7.7 millones de toneladas de dióxido de carbono, gas invernadero.
Durante la presentación de los resultados de dicho plan, el jefe del Ejecutivo local, Marcelo Ebrard, destacó que cualquier acción de gobierno debe ir acompañada de un cambio en el patrón de comportamiento de sus ciudadanos, pues de lo contrario no habría éxito.
“Lo más importante es que el gobierno puede hacer todos los planes que quiera, infraestructura, pero si los patrones de comportamiento de las personas no cambian no se logra ningún avance relevante o decisivo. En estos seis años el cambio más importante en la movilidad de la ciudad ha sido la aparición de bicicletas por todas partes en la zona plana de la ciudad.”
Agregó que “el cambio climático era un tema conocido por no más del 12 por ciento de la población, hoy en día de más del 85 por ciento de la población”.
Tan sólo la transformación del transporte público registró la mayor disminución de emisiones con un total de 4.79 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2), equivalente a 62 por ciento del total de emisiones reducidas.
El conjunto de acciones implementadas por el GDF mereció el reconocimiento de los premios Nobel de Química y de la Paz, Mario Molina y Rejandra Pachauri, respectivamente, quienes acompañaron al jefe de gobierno, en un acto en el que Ricardo Moctezuma, director de la Fundación Ciudad Humana de Bogotá, Colombia, anunció que el DF será la “ciudad ejemplo” en la próxima Cumbre de Cambio Climático a realizarse en noviembre próximo en dicho país sudamericano.
Por su parte el doctor Mario Molina subrayó que pese a los riesgos que representa el cambio climático del planeta, aún no hay un acuerdo internacional que revierta tal situación.
“Hay intereses de grupos muy poderosos que se han propuesto limitar acciones en este contexto, incluso en países como Estados Unidos, pues han hecho campañas para cuestionar la validez de la ciencia del cambio climático.
“Esto ha retrasado el proceso de que se llegue a un acuerdo internacional que en un momento dado va a ser necesario porque hay que ponerse de acuerdo para ponerle un precio a las emisiones de gases de efecto invernadero”, apuntó.
Fuente: MVS
