El ministerio francés de Agricultura paró por decreto la comercialización, utilización y cultivo de maíz genéticamente modificado
El ministerio francés de Agricultura paró por decreto el pasado sábado, la comercialización, utilización y cultivo de maíz genéticamente modificado MON 810, producido por Monsanto.
Estaba ya previsto que una proposición de ley que prohíbe el cultivo de maíz transgénico fuera debatida en el parlamento francés el próximo 10 de abril.
Pero el ministerio de Agricultura consideró que había urgencia, debido a la cercanía del inicio del periodo de siembra para establecer una prohibición, invocando el “principio de precaución”.
“Según datos científicos fiables y muy recientes investigaciones internacionales, el cultivo de semillas de maíz MON 810 (…) presentaría graves riesgos para el medio ambiente, así como un riesgo de propagación de organismos dañinos convertidos en resistentes”, indica el texto.
Los estados de la Unión Europea tienen la posibilidad de prohibir en su territorio un OGM autorizado por la UE.
Pero Francia quiere modificar una propuesta de la Comisión Europea para ampliar y consolidar los motivos por los que un Estado miembro puede negarse a cultivar un OGM en su territorio, si lo autoriza Bruselas.
París quiere que cada empresa productora de OGM “solicite a cada Estado una autorización para cultivarlos”, precisó recientemente el ministro de Agricultura, Stephane Le Foll.
Con información de agencias
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