- La revegetación y otras acciones ambientales implementadas desde 2019, han permitido un aumento en la biodiversidad de la ciudad
Teorema Ambiental/Redacción
La Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México informó que desde 2019, se han creado 790.28 metros lineales de bardas vivas en diferentes zonas de la ciudad, que representan un modelo de naturación vertical y contribuyen a la retención de polvo, partículas y múltiples sustancias contaminantes, así como incrementar la filtración de agua.
Por conducto de la Dirección de Infraestructura Verde se crearon 26 bardas vivas en las alcaldías Gustavo A. Madero, Tláhuac, Iztapalapa, Magdalena Contreras, Tlalpan, Cuauhtémoc, Iztacalco y Xochimilco, con una superficie total de 790.28 metros lineales de vegetación, de 2021 a la fecha.
En este modelo de naturación vertical se plantaron 1893 ejemplares y algunas de estas bardas vivas han estado acompañadas de jardines para polinizadores, con plantas como lantana y lavanda. Las bardas vivas también proveen alimento y refugio a especies polinizadoras y embellecen el entorno. Algunas fueron creadas en parajes de áreas naturales protegidas, estaciones del Metrobús, planteles educativos, parques y Puntos de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes (Pilares).
Estas bardas forman parte del proyecto de revegetación de la ciudad, que constan de 51 333 455 árboles, arbustos y cubresuelos, de 2019 a la fecha. Estos más de 51 millones de ejemplares superan, por más de cinco veces, la meta inicial establecida en el Reto Verde de plantar diez millones de plantas.
La revegetación ha permitido incrementar la superficie de área verde urbana por habitante de 14.5 m², en 2017, a 19.4 m², en 2020. Cabe señalar que aún falta contabilizar las nuevas áreas verdes y ejemplares establecidos de 2021 a 2024, por lo que será mayor el área verde por habitante.
La revegetación de la ciudad, que incluye kilómetros de bardas vivas y la construcción de 1300 jardines para polinizadores, ha sido esencial en la mejora de las condiciones ambientales. Uno de los indicadores de esta mejoría es el aumento en la biodiversidad.
Como resultado, la Sedema indica que pasaron de la observación de 355 a 397 especies de aves, mientras que en las áreas naturales protegidas registramos más de 1700 especies diferentes, destacando registros de especies que antes no se observaban fácilmente en la ciudad, como el coyote, el lince americano y la zorra gris.
El trabajo ambiental realizado en la Ciudad de México, de 209 a 2014, ha sido reconocido por instituciones y organismos nacionales e internacionales, al otorgar 27 premios por el nivel de ambición y compromiso de la ciudad para garantizar el derecho a un medioambiente sano de sus habitantes, finalizó la dependencia capitalina.
Fotografía: Sedema