Ciencia y tecnología

Basura orgánica y bacterias, vía para fertilización efectiva

La basura orgánica, mediante un proceso sencillo, puede convertirse en fertilizantes muy efectivos en campos agrícolas al combinarla con algunas bacterias, con un costo mínimo en el mercado, comparado con otros productos convencionales que cada vez demandan mayor aplicación para cumplir su cometido.

Desechos como rastrojos, pajas, malezas, bagazo de caña, agave tequilero, pulpa de café, estiércol de bovinos, gallináceos, caprinos y hasta basura orgánica urbana son útiles para transformarse en humus, que además de dar mayor fertilidad, es un enemigo natural de plagas y enfermedades.

El humus no es más que el resultado de una mezcla bien hecha de todos los residuos antes mencionados y que tiene la característica de ser un producto «noble» que recupera los suelos agrícolas que ya están agotados, es decir, con baja materia orgánica y vida biológica.

Esto es conocido como proceso de humificación, cuyo resultado es abono orgánico biológico no contaminante, no tóxico y que, por el contrario, mejora y logra aumentar la producción en suelos agrícolas. Además de que las tierras pobres dañan el medio ambiente por su bajo contenido de materia orgánica y vida biológica, también repercuten de manera negativa en la producción agrícola y, por consecuencia, en la economía de los trabajadores del campo.

El diseño original que generó la vida en el planeta se debe al humus, que no es otra cosa que tierra negra producida en las selvas y en los bosques. Pero si éstos son depredados o talados (como está ocurriendo) se interrumpe el proceso de fertilidad, y lo que a la naturaleza le llevó siglos construir, el ser humano es capaz de destruirlo en poco tiempo.

Con una experiencia de 40 años humificando residuos agrícolas en varias partes de la República, Arturo Coste Alvaradejo, director de ventas nacionales de Gro-Green, aseguró que la improductividad de los suelos tiene efectos graves sobre la contaminación ambiental. Al revertirse el proceso sobre las tierras agrícolas agotadas, la sociedad es la que directamente se ve beneficiada.

Explicó que el costo de una dosis humificadora es mínimo, apenas de 60 pesos el kilogramo, y esta pequeña cantidad transforma una tonelada de materia orgánica. A esto hay que agregarle el costo de mano de obra para realizar la operación, lo cual no excede los 30 pesos. La materia orgánica humificada, al ser rica en microorganismos y vida biológica, ayuda a mejorar la aireación y la penetración del agua en el suelo. Es decir, los suelos se tornan porosos, como si fueran de migajón, y esto ayuda a incrementar la capacidad de almacenamiento de agua. Así, la materia orgánica puede llegar a absorber y retener de entre cinco a seis veces su propio peso.

De igual manera, el humus permite que la tierra sea más fácil de labrar al disminuir la compactación y aumenta la disponibilidad de todo tipo de nutrientes para las plantas, lo cual a su vez ayuda a que no se usen tantos fertilizantes o que este tipo de productos se aprovechen de una mejor manera.

Por si fuera poco, otra de las virtudes de una dosis humificadora consiste en que evita el encostramiento de los suelos, elevando el porcentaje de germinación y aumentando la capacidad de los terrenos a resistir los cambios bruscos en el pH (grado de acidez y alcalinidad). Literalmente, se puede afirmar con toda seguridad que le da vida a la tierra al desarrollarse millones de microorganismos e insectos benéficos.

El humus ayuda a que se gaste menos dinero en plaguicidas, ya que también actúa como enemigo natural de plagas y enfermedades y hace fuertes a las plantas contra el viento, las sequías o las inundaciones.

En la zona urbana el humus puede usarse en parques, jardines, viveros y programas de reforestación y se puede emplear en la recuperación de tierras poco fértiles como el ex lago de Texcoco.

De tal manera que acabar con la improductividad se convierte en una preocupación para Gro-Green Campbell de México, empresa fabricante del humificador Acti-Green, el cual además de resolver problemas agrícolas, también coadyuva a la solución de la acumulación de toneladas de basura que va a dar diariamente a los tiraderos a cielo abierto.

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