El ecoturismo es una actitud de respeto e interacción del hombre con la naturaleza, conducta que los turistas han empezado a manifestar en sus viajes a las áreas naturales y que ha nacido a partir de la conciencia en torno a los problemas ambientales del planeta.
Esta nueva modalidad del turismo considera una promoción especializada y una mayor participación de los turistas con el objeto de facilitar experiencias y actividades. El ecoturismo es una actividad que hay que prever, de lo contrario, puede ocasionar problemas ambientales por el uso intensivo de los recursos.
Dentro de las categorías más aceptadas del turismo vinculado a la naturaleza podemos identificar a aquellas actividades que se realizan en zonas costeras, áreas naturales protegidas (marítimas o terrestres), en comunidades interesantes por su diversidad étnica o por sus manifestaciones culturales e históricas.
El ecoturismo, más que una moda comercial del mundo turístico, es una alternativa de viaje, un reto por establecer actitudes y pensamientos del cual emergen compromisos por promover el establecimiento de negocios a partir del cuidado del medio ambiente, donde la participación, la responsabilidad y la ética comercial buscan un beneficio común.
Para la conservación del medio, el ecoturismo requiere: participación estratégica de las comunidades que habitan los destinos ecoturísticos, generación de una cultura turística y capacitación de los prestadores de servicios, información adecuada al turista y a la población local, conocer los ambientes naturales y culturales para diversificar los productos, realizar una permanente educación ambiental, seguridad jurídica para la realización de actividades que requieran cierta capacidad y nivel técnico de conocimiento, aprovechamiento racional de los recursos y rentabilidad económica y social.
2002, Año Internacional del Ecoturismo: acciones en México
La actividad turística se sitúa dentro de la encrucijada de los grandes desafíos a los que se enfrenta el mundo: el combate a la pobreza, la conservación del medio ambiente y del patrimonio cultural. En esta perspectiva, el ecoturismo es capaz de contribuir en la lucha contra la marginación y la pobreza mediante la generación de riqueza.
Ante la creciente demanda por las actividades ecoturísticas en el mercado internacional de viajes, la Organización de las Naciones Unidas designó el 2002 como Año Internacional del Ecoturismo, motivo por el cual se han venido realizando distintos foros y actividades, tanto nacionales como internacionales.
En México, las secretarías de Turismo, de Medio Ambiente y Recursos Naturales, y el Instituto Nacional Indigenista (INI), así como otras dependencias, se suman a esta celebración para consolidar y fortalecer esta actividad mediante un convenio que considera una inversión inicial de 254 millones de pesos en infraestructura.
Según datos de la Secretaría de Turismo, las negociaciones comerciales de ecoturismo y turismo de aventura aumentaron 12 por ciento en relación al año 2001. El porcentaje de compradores por segmento fue de 39 por ciento para el ecoturismo y 40 por ciento para el turismo de aventura, superando cada sector, una tercera parte al registrado en 2001.
México tiene 11,000 kilómetros de litoral y su geografía permite tener 9 de los 11 ecosistemas hasta hoy reconocidos, además ocupa la cuarta posición mundial en materia de biodiversidad, cuarto lugar en número de aves con 1,200 especies y tiene todas las posibilidades para convertirse en una verdadera potencia ecoturística.
