>.
32
ta
De manera aislada se dio el fenómeno de “paraíso de
contaminación”, cuando en un proceso de integración comercial los
contaminantes ubican su producción en territorio de uno de los socios
que aparentemente tiene un sistema institucional ambiental más laxo
César Angulo
ni
bueno
ni
malo
Los efectos ambientales del libre comercio
TLCAN y
medio
ambiente:
phoEnix, a
rizona
.— Próximo a cumplir
su decimoquinto aniversario, el Tratado
de Libre Comercio de América del Norte
(TLCAN) ha sido calificado por expertos
en medio ambiente y comercio de
México, Estados Unidos y Canadá
como “ni muy bueno ni muy malo” para
el medio ambiente.
Esta tímida evaluación de la apertura
comercial de México y sus efectos
ambientales contrasta con una lista de
23 denuncias y peticiones ciudadanas
contra omisiones de legislación
ambiental que han puesto en riesgo
la salud de personas y ecosistemas
a causa de industrias, iniciativas de
gobiernos y proyectos privados que
se han presentado ante la Comisión de
Cooperación Ambiental de América del
Norte (CCA), el organismo trinacional
encargado de prevenir los conflictos
ambientales originados por las
relaciones comerciales entre los tres
países.
Sin embargo, la tibia evaluación de los
efectos ambientales de libre comercio va
acorde a la personalidad del organismo
trinacional, el que invariablemente evita
asumir posiciones críticas y prefiere
el diálogo y entendimiento entre los
ministros y autoridades del medio
ambiente de los tres países que integran
el TLCAN.
En ocasión del “Cuarto simposio de
América del Norte sobre evaluación
de los efectos ambientales del
comercio”, la CCA entrevistó a un
grupo de 24 expertos de Norteamérica
e internacionales con el objetivo de
obtener una relatoría y análisis de las
relaciones entre el libre comercio y el
medio ambiente.
En el documento
Evaluación ambiental
del TLCAN
, los expertos consultados
señalan que los temores que fueron
infundados inicialmente despertó el
acuerdo comercial sobre un aumento
de las presiones competitivas de
la industria que forzarían hacia una
competencia a la baja en materia de
reglamentación y regulación ambiental.
