Carmen Muñoz siempre ha estado interesada en el medio ambiente. Para ella, el cuidado de los recursos naturales es fundamental, pero al querer instalar una planta recicladora de agua en su hogar, tuvo que enfrentarse a los altos precios de estos aparatos.
La más barata no cuesta menos de 120 mil pesos, con su respectivo consumo de electricidad para hacerla funcionar, por lo que al fin de cuentas, según la señora Muñoz, “le sale más caro el caldo que las albóndigas”.
Sin embargo, el Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (CIATEJ) tiene una solución que le puede ayudar a Carmen.
José de Anda Sánchez, investigador de la institución, explica que un grupo de académicos creó un humedal tradicional, con la ventaja de que en él se puede plantar un jardín.
El sistema consiste en una planta tratadora de aguas residuales en el hogar, pero sin los inconvenientes del excesivo gasto por maquinaria, energía, malos olores y mantenimiento.
Según De Anda Sánchez, para poder instalar este sistema, es necesario que las aguas residuales del hogar —es decir, aquellas que vienen de los inodoros, lavabos y lavadora— confluyan en un solo punto de la vivienda antes de salir al drenaje.
Para poder instalar el equipo en una vivienda donde habiten seis personas, se requiere de un espacio de seis metros de largo por uno y medio metros de ancho.
Carmen vive en una casa dúplex del Distrito Federal y en el patio de su hogar tiene un espacio como éste, donde tiene un jardín en no muy buenas condiciones.
De Anda Sánchez apunta que, una vez identificado el espacio para la planta tratadora de agua, el siguiente paso es instalar un tanque séptico en esa área para sedimentar los sólidos contenidos en el líquido residual. Con este paso, indica, se degrada 20 por ciento de la materia orgánica.
Para acabar con el desecho restante, se ubica un filtro anaerobio —en ausencia de oxígeno— que elimina hasta 85 por ciento de las bacterias.
A Carmen le interesó mucho este sistema, pero se preocupa por los olores que pudiera despedir. Según De Anda, todo va oculto y no desprende ningún olor, contrario a las tradicionales tratadoras de agua.
Esta fase se consigue mediante una capa de tezontle y una cubierta de tierra o humus donde se pueden cultivar plantas ornamentales como alcatraces, aves de paraíso o cuna de Moisés.
La porosidad del tezontle permite la entrada de oxígeno al agua, lo que ayuda a su limpieza completa y, para cuando salga de éste, a su utilización en el riego.
Según De Anda, la instalación del sistema no cuesta más de 20 mil pesos, con la ventaja de que la totalidad del líquido que se perdía en el drenaje ahora se recicle.
“Adicionalmente, hemos visto que algunas personas pueden aprovechar esta riqueza de agua para cultivar plantas ornamentales y posteriormente venderlas.”
Según el investigador, en un espacio más grande se podrían conseguir mejores resultados económicos con la siembra de plantas.
Carmen todavía no piensa en el negocio, a ella le preocupa que algunos de los químicos que comúnmente se usan en el hogar pudieran dañar su jardín. De Anda expone que las aguas jabonosas o los líquidos derivados de la limpieza de pisos y ropa no afectan los jardines, aunque sí recomienda no verter líquidos muy agresivos como tíner, sosa y pinturas sobre el drenaje.
Agrega que el mantenimiento de la planta también es mínimo, pues con eliminar una vez al año los sedimentos sólidos es suficiente.
Gracias a este sistema, según De Anda, ahora las casas habitación, fraccionamientos, hoteles, escuelas y unidades departamentales pueden tener una opción para ayudar a los inmuebles a ser autosuficientes en el tema del agua, sobre todo ahora que se prevén aumentos.
José de Anda Sánchez comenta que el sistema está en proceso de patentado, pero toda aquella persona que desee saber más sobre el mismo puede acercarse al Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco, donde le ayudarán a instalar uno en casa.
Carmen ya está ahorrando y espera que muy pronto pueda adquirir un sistema de este tipo para utilizarlo en su hogar.
Fuente: El Universal
